PortadaCorreoForoChatMultimediaServiciosBuscarCeuta



PORTADA DE HOY

Actualidad
Política
Sucesos
Economia
Sociedad
Cultura
Melilla

Opinión
Archivo
Especiales  

 

 

OPINIÓN - MARTES, 17 DE ABRIL DE 2012

 

OPINIÓN / EL OASIS

Bueno está el patio
 


Manolo De la Torre
manolodelatorre@elpueblodeceuta.com
 

Tal y como esta el patio, escribir se ha convertido en un ejercicio peligroso. Tan peligroso como para llorar. Algo que ya afirmó Larra en su día. Y eso que él escribía en la capital de España. De haber escrito en provincia, don Mariano José, seguramente no habría podido destacar por su ironía cruel y una mordacidad que causaba miedo entre quienes se sentían aludidos. Puesto que se lo hubiesen cepillado en un amén.

Escribir en sitios pequeños resulta tarea sumamente complicada. Compleja donde las haya. Debido a que cuanto se escribe está sometido a un estudio prejuicioso de provincia. Y ante ello, el opinante se halla a merced de las circunstancias. Negativas para él. Claro está. Y acaba confundido. Hecho un lío. Por no entender que sus pareceres sean motivo de juicios temerarios. En realidad, un dislate.

Pues bien, hoy, tras siete días sin decir ni pío, a fin de poner mis ideas en orden, no vaya a ser que el error sea tan contumaz como mío, estoy a punto de contar cosas relacionadas con la actuación del Rey. Por más que a mí me importe un bledo que don Juan Carlos se haya ido a matar elefantes -allá donde el viento da la vuelta-, sino porque yo quisiera que si un día una de mis caderas se quebrara, me atendieran de manera que mi recuperación se produjera con la misma celeridad que la del Monarca. Los tiempos que corren, eso sí, no son los más apropiados para que los poderosos hagan ostentaciones de ningún tipo.

Tampoco me faltan ganas de ponerme a contar acerca del asunto que nos ha tenido entretenidos durante los últimos días; es decir, de lo que ha venido ocurriendo en el seno de la Policía Nacional de Ceuta. Siquiera fuera para demostrar que cuanto dije, en su día, ha sido tan cierto como para acabar con el final auspiciado: José Luis Torres sale de naja y es sustituido por Jaime Castellví.

Lo que no voy a hacer, de momento, por el mucho respeto que le tengo al organismo policial, es sacar a relucir las luchas intestinas que tanto daño le han causado a Torres y que, de no ponerse fin a éstas, pueden también trastornar el quehacer de Castellví. A quien le deseamos tanta suerte como destreza y valor para remediar los males internos. De los que tanto sabe… Así, pasado un tiempo prudencial, sería absurdo oírle decir que desconocía el tema.

También sería conveniente que el delegado del Gobierno, Francisco Antonio González, supiera lo mal que le sienta a la cúpula policial que alguien, más o menos parecido al inspector Gadget , se dirija a sus miembros en plan ordeno y mando. Y, desde luego, estoy dispuesto a jurar, donde haya que jurarlo, que este periódico no tiene culpa alguna de que haya persona deseosa de inmiscuirse en labores que no le corresponden. O bien, si le corresponden, sobreactúa y termina dando el cante.

Me agradaría dedicarle unas palabras a Pedro Gordillo, una vez leída su carta, en la cual se pone a disposición de Vivas; pero me abstengo de hacerlo antes de hablar con él.

En fin, que he vuelto al tajo. Y lo hago invocando a todos mis santos para que esta semana el Madrid, mi equipo desde que vestía yo pantalones cortos, consiga resultados favorables en Munich y en Barcelona. Pues en tiempos de crisis, donde la mala leche es la protagonista principal, uno se agarra al fútbol para no pensar en… todos los muertos de la señora Merkel.
 

Imprimir noticia 

Volver
 

 

Portada | Mapa del web | Redacción | Publicidad | Contacto