Me refiero a que circula la
leyenda urbana de que algunos afiliados que no estaban al
corriente del pago de la pequeña cuota del partido están
siendo ayudados por algún espíritu generoso y amigo del
mecenazgo a satisfacer sus débitos de forma que pueden
ejercer como militantes de pleno derecho. ¿Que resulta un
poco cutre? Bien, pero no es nada nuevo, aunque de ahí a ir
recabando apoyos y firmas en medio de la calle es un poco
rizar el rizo de la avaricia de apoyos. Eso me lo confió un
militante que firmó, no por apoyar, sino porque le daba lo
mismo y está de acuerdo en que un Congreso con dos
candidaturas “da más juego” y resulta infinitamente más
divertido para los ganadores, amen de sustentar sólidamente
la candidatura elegida por los votos. Así se erradican
“dimes y diretes” y se da pan a los analistas para que
mastiquen, traguen y regurgiten por una buena temporada.
Todo son beneficios.
Al igual que beneficios para la ciudad y su futuro
tratamiento singular busca el Presidente Vivas esta vez con
el ministro García-Margallo que comparado con Moratinos es
como comparar a Chiquito de la Calzada con Séneca. Seguro
que del sesudo García-Margallo no sacan chistes como los de
Moratinos que nos hicieron reír a mandíbula batiente durante
el zapaterismo, aunque después de este la que vino fue aún
peor. Se ve que el anuncio de Juan Vivas sobre que no haría
una campaña “al uso” en plan prolegómenos del Congreso
Regional es una realidad, aunque entre recabar afinidades y
negociar con el de Exteriores, a la ciudadanía aprovecha más
lo segundo, al tiempo que demuestra que los intereses del
pueblo de Ceuta tienen en todo momento prioridad a los del
propio partido y no se encuentran condicionados por las
querencias partidistas y que la candidatura para presidir el
PP ceutí no va a parar ni por una centésima de segundo el
discurrir normal de las obligaciones de gobierno de la
ciudad. A pesar de que esta forma de actuar sea criticada
por los aspirantes.
Verdaderamente con los problemas que acucian a toda España y
con Esperanza Aguirre pregonando el devolver competencias
autonómicas al Ejecutivo Central para ahorrar con el plus de
que el Gobierno intervendrá las Autonomías que no cumplan
con los objetivos previstos, el Presidente Vivas tiene en
qué emplear sus menesteres, porque los meses venideros se
postulan bastante agitados .Ejercicio de responsabilidad por
lo tanto el no permitirse distracciones y menos aún
enzarzarse en una campaña para ofrecer lo que ya se tiene y
ya se ha expuesto.
En este sentido hay poco margen de sorpresa aunque extraña y
mucho que el candidato Gordillo no haya comparecido ya ante
los medios para realizar su oferta concreta y proponer ideas
novedosas dentro de lo que se ha dado en denominar la
“política-fashionista” que viene a ser trazar alternativas
rompedoras con una sólida base doctrinal y filosófica
rozando el populismo pero sin caer en él.
¿Y qué innovaciones dentro del equilibrio traerá en la
cartera el candidato? Existe auténtica curiosidad porque el
tiempo corre y aún no hay un programa concreto sobre la mesa
que justifique la oportunidad de la alternativa. Y es un
tema lo bastante enjundioso cómo para esperar hasta última
hora y presentar unas líneas programáticas deprisa y
corriendo, sin tiempo para reflexionar y realizar el
análisis comparativo. Más algo al menos de marketing
entendido cómo aparición, presencia y comparecencia
mediática para ir adelantando el grueso de las propuestas.
Más las lógicas ruedas de prensa con preguntas y respuestas
para tomar el pulso a la candidatura.
En lo referente a Vivas su discurso es invariable,
evoluciona y matiza, pero sobre idénticas premisas, los
ciudadanos lo conocen y ahora le ven cómo al “correcaminos”
tres meses de ministerio en ministerio. Pero del otro
candidato se espera que muestre y demuestre lo que puede
aportar ahora dentro del ideograma del PP y en qué puede
enriquecer doctrinalmente el discurso de su oponente.
Dos candidatos es el lujo de poder comparar. El problema
está en que tenemos un solo discurso y falta el otro, hoy
por hoy inexistente.
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