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OPINIÓN - MIÉRCOLES, 11 DE ABRIL DE 2012

 
OPINIÓN / ANALISIS

Sensata propuesta de Coalición Caballas

Por Nuria de Madariaga


Y a quien puede habérsele ocurrido la chambosa de idea de volver al tiempo de “los papelillos” para justificar el empadronamiento en Ceuta a la hora de viajar? Lo del “carnet de residente” podría ser una alternativa, de hecho es la que propone Mohamed Alí en nombre de su Coalición, pero tenemos que considerar que en el DNI no pueden aparecer datos falsos y que es con el carnet de identidad con el que los ciudadanos nos movemos.

Así con el simple domicilio en el DNI se acredita todo lo acreditable bajo riesgo de incurrir en un delito de falsedad si los datos que aparecen no se corresponden con la realidad. Demasiado enrevesado todo lo relativo a tanta justificación y tanto recelo, con las lógicas excepciones, porque hay casos cómo el mío concreto en el que residiendo ya quince meses en Ceuta no he conseguido el empadronamiento por la multitud de trámites y exigencias y eso que no me encuentro empadronada en un piso de cincuenta metros junto a otras veinte personas. Supongo que será algún tipo de directriz política para impedir el aparecer en el padrón a gente de Atapuerca con licenciatura universitaria. Pero, discriminaciones aparte, incluso una especie de “carnet de residente” ceutí o melillense parece equivaler a un tratamiento desigual con el resto de España. Realmente no existe ninguna Autonomía donde se exija ese tipo de DLI es decir, Documento Local de Identidad y de hecho cuando los catalanes comenzaron a tapar la E de España en los vehículos para introducir una C de Cataluña se armó la marimorena.

¿Y quien no recuerda cuando en el País Vasco comenzaron a emerger hace ya unos años y en plena vorágine del nacionalismo una especie de carnets de identidad vascos, se les consideró documentos falsos, porque lo eran. ¿Y ahora vamos a aparecer los ciudadanos de las dos joyas de la corona de España, léase Ciudades Autónomas, con una especie de engendro acreditativo de que somos quienes decimos ser y vivimos donde decimos vivir? ¿O es que piensan que la ciudadanía se dedica a falsificar documentos de identidad? Tampoco merece la pena por un descuento en el barco el vivir con la espada de Damocles sobre la cabeza porque nuestra documentación contenga datos falseados o por optar a mejor tratamiento fiscal. De hecho ni Ceuta ni Melilla son Andorra donde sí han fijado deportistas y millonetis sus residencias a lo largo de los años.

Tratamiento desigual y discriminatorio ¿Necesita un madrileño un carnet de residente en Madrid para poder moverse si en el DNI consta como dirección calle Goya 17 Madrid?. Todo chamboso, el “papelillo” obtenido tras hacer cola, cómo en los tiempos de la cartilla de racionamiento y el estraperlo, aunque ahora no se trata de adquirir pan, azúcar y garbanzos sino rebajas en esas navieras que no se deciden a nacionalizar aplicando el conocido postulado de Kant “Contra los abusones, nacionalizaciones”. ¿O no era de Kant? Disculpen el lapsus, pero no se puede estar “en todo”.

Lo evidente es que hay que reconocer el mérito de Mohamed Alí por haberse interesado por la amenaza de “el regreso de la cola y el papelillo” porque son ese tipo de incomodidades las que amargan a la ciudadanía. Todo lo que sea burocracia y “papelillos” significa pérdida de tiempo y agobios. ¿O es que existe alguien a quien la burocracia no le parezca esencialmente aborrecible? En esta ocasión el abogado de Caballas ha sabido adelantarse y “vibrar” con la sensibilidad colectiva y tal vez debería extender su campo de actuación al hecho de que si se llega a Ceuta a las diez de la noche, estragadito por la travesía y sin haber tomado el café aguado de la cafetería del barco por no pagar los precios del Ritz, el viajero se encuentra con las dos cafeterías de la Estación Marítima cerradas a cal y canto. ¿Y han visto ustedes alguna Estación Marítima que se precie donde antes de que acabe el servicio todo se encuentre cerrado?

Es más ¿Han comprobado ustedes que hasta en la más humilde estación de autobuses de España hay un puestecillo con periódicos y chucherías? Pues en la abolengosa Estación Marítima de Ceuta no hay puesto de prensa, es decir, que se niega subrepticiamente el derecho a la información y al tiempo se impide que quienes llegan puedan tomarse un café caliente y un donuts. O a la inversa, porque pueden ser quienes parten hacia la Península previo trámite de rebaja en los billetes si se ha tenido la inmensa suerte de que, viviendo en Ceuta, accedan a empadronarte y te proporcionen “el papel” porque aunque se cambie el DNI con el nuevo lugar de residencia no es bastante. Al menos aquí.
 

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