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Con los tiempos que corren y los
acontecimientos de indole nacional y local, de sucesos y
demas robos y atracos, siempre agradece uno de las
advertencias, que puedan darle a uno sobre los
comportamientos de los hijos. Hay una que no se enteraba de
nada y perdia los articulos de opinión en los cajones, vamos
que ni levantaba la cabeza del teclado y perdia los
columnistas y colaboradores.
Por el mismo hilo del arbol genealogico, en mis tiempos de
infantil, habia una señora en la Plaza de los Reyes, que
siempre hacia las avertencias a mi madre, cuando llegaba a
sentarse al fresquito con las demas marias, a darle al
filete y al palique, se le acercaba y le espetaba tu hijo ha
hecho esto, ha dicho puta, ha querido besarse con su ligue,
se ha echado mano a la bragueta por un subidon de
testiculina racial, para marcar el terreno entre los
zagales, para ver quien es el gallo del corral, en los
territorios de juegos en la Plaza de los Reyes, ni que decir
tiene, que se pasaba al consejo de ministros por la noche,
cuando mi padre llegaba hasta el gorro de los paraguayos, y
de estar de pie todo el dia, al cabo de los años sus hijos
son unos autenticos grifotas y porrilleros, vamos que la
madre siempre estaba pendiente de los polluelos de las demas
madres y sus hijos con los canutos desde chiquillo. Treinta
años despues, me hace gracia un poco todo esto porque muchas
marias criticonas, de estar sentadas en los bancos del
barrio llenando el suelo de pipas y cascaras, de sacar el
pellejo a medio barrio te pasan el orden del dia y dicen tu
hijo esto y lo otro.
Cuando los rios suenan agua llevan, y siempre es bueno que
te pongan sobre aviso de los movimientos extraños, que igual
ahora se asusta y sobresalta y antes cuando Franco era un
pecado mortal de la santa inquisición. Queda como mera
anécdota un articulo censurado en el otro sitio, y van para
hacer un libro como el que no quiso el de la sarten, era el
ozú con tintes de provocación de hace tambien sus añitos,
siempre a mi me gustaba vacilar y presumir con las niñas del
poligono, quizá esa novedad de los quince años te hacia
presumir, de tus primeros compases con una cuchilla de
afeitar, de ponerte unas gafas de sol y salir a pasear
maqueado todas las tardes, a muchos eso le cabreaba y decian
que uno parecia mariquita, de sudores de sobacos de
mostachos y de churretes, chiquillerio ordinario de la epoca
que no comprendian el galanteo con las chicas.
Tuvo su maximo esplendor en las comuniones de los ochenta,
me vestia como Aryan cantaba en las noches de verbena de
barriadas, de punta en blanco, en casa de un familiar me
cambié a una equitación del Liverpool de la epoca, al volver
al poligono, estaban los vacilones del barrio, exclamando
osu…., quizá mi presencia como Alan Kennedy, el que le marcó
el gol al Madrid en la final del 81 , no se les pasaba por
la cabeza, yo lo noté aquello podria pasar a las manos, a
las broncas y mi familia no estaba acostumbrada a esas
camorras y reyertas, segui con mis ligues y amigas,
pegandome los lotes por los portones de los alrededores, que
buenos tiempos, alguno lo haria mejor y hasta los padres les
reian las gracias, para mi era como pasar la transición de
que el niño se habia hecho hombre …., casi treinta años
despues uno sufre como cristiano el pasar y ver a algunos
pelusas y pibes de oro, morirse al sol de la pared, estos
eran unos pobres diablos ignorantes, nadie les dijo a su
madre siquiera tu hijo ha hecho esto….
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OPINIÓN / ESCRITOS CABALLAS
