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El rey de Marruecos, Mohamed VI, ha sufragado los gastos de
inhumación del soldado Imad Ibn Ziaten, la primera de las
siete víctimas mortales de Mohamed Merah, el asesino de
Toulouse. El entierro fue ayer en la localidad marroquí de
Mdiq (Rincón), de donde es originaria su familia, aunque él
nació en Francia en 1981.
El soldado Imad Ibn Ziaten, la primera de las siete víctimas
mortales de Mohamed Merah, el asesino de Toulouse, fue
enterrado ayer -tal como había informado EL PUEBLO- en la
localidad marroquí de Mdiq (Rincón), de donde es originaria
su familia.
El joven, que había nacido en Francia en 1981, era
suboficial del primer regimiento de paracaidistas de Francia
y fue asesinado a tiros por Merah, de origen argelino y de
23 años, el 11 de marzo en un barrio al este de Toulousse,
donde se había citado con él a través de internet para
comprar la moto que el soldado había puesto en venta a
través de internet.
Terribles asesinatos
El rey de Marruecos, Mohamed VI, ha sufragado los gastos de
inhumación del difunto soldado, según informó la agencia de
prensa marroquí MAP.
Los restos de Imad Ben Ziaten fueron trasladados en avión a
Marruecos el miércoles desde Toulouse, en vuelo París-Rabet-
Tánger, según informó el cónsul general de Marruecos en
Toulouse a la agencia de noticias francesa AFP. El rey de
Marruecos “condenó firmemente” estos ataques, en los que el
asesino, antes de ser abatido por la policía francesa, mató
también a otras seis personas, entre las que se encontraban
otros dos soldados -uno de ellos también musulmán-, un
profesor y tres niños judíos.
Los “terribles” asesinatos fueron “contrarios a las
enseñanzas religiosas, principios nobles y universales y los
valores humanos y morales”, declaró Mohamed VI.
El pasado viernes, los musulmanes de la región de Normandía
(Noroeste de París) rindieron un homenaje a la memoria del
soldado, en una mezquita cerca de Rouen (Francia).
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