Desde que, en el año 2008, la crisis económica mundial
empezara a golpear duramente a muchas personas y familias en
nuestra Diócesis, Cáritas, la Iglesia, ha mantenido su
compromiso con la justicia y ha buscado nuevos caminos para
afrontar los nuevos retos que han llegado hasta nuestros
equipos de acogida y proyectos de intervención.
Para ello, tiene a disposición de las familias más
necesitadas la RED CARITAS: RED DE ACOGIDA Y ATENCION
PRIMARIA reforzada con la RED SOCIO - LABORAL
LA RED DE ACOGIDA Y ATENCION PRIMARIA.
Es el primer nivel de atención social a la ciudadanía. En
donde se atiende a las personas o familias que nos solicitan
apoyo para cubrir necesidades tanto básicas (alimentos,
vivienda, etc.) como personales (escucha, orientación,
asesoramiento, acompañamiento, etc.)
Se desarrolla fundamentalmente desde los equipos de Caritas
parroquiales, es una red reconocida de escucha y acogida.
Probablemente constituye la red de ayuda más extensa y
cercana de apoyo para las personas en situaciones de
exclusión y vulnerabilidad, del territorio diocesano tanto
en el nivel eclesial como civil. En la Diócesis de Cádiz y
Ceuta esta red está formada por 94 grupos de Caritas, con
más de 550 personas voluntarias.
En el informe que presentamos a continuación se refleja la
realidad que llega a los Servicios de Acogida y Atención
primaria de las Cáritas Parroquiales del Territorio
Diocesano: Bahía de Cádiz, Comarca de la Janda y Campo de
Gibraltar.
• ¿QUIÉNES HAN SIDO LOS MÁS AFECTADOS POR LA CRISIS?
La crisis sigue causando un grave impacto en los ciudadanos
y ciudadanas más vulnerables, y ha revelado la aparición de
nuevas formas de pobreza.
-Muchas personas vienen por primera vez a Cáritas: Son
personas que han pasado de la vulnerabilidad a la pobreza,
afectadas principalmente por el desempleo creciente.
-Muchas personas vuelven después de haber finalizado
procesos de inserción social. Son personas que ya
participaron en procesos de inserción a través de Cáritas
pero que, dada su situación de vulnerabilidad social y
precariedad laboral, se han visto endeudadas, empobrecidas
y, de nuevo, excluidas.
• Perfil de las personas demandantes de ayuda:
- Jóvenes desempleados en busca del primer empleo, sin
perspectivas de encontrar trabajo con poca formación. Aunque
en los últimos años era posible acceder a un empleo
precario, esa opción ya no es posible. La falta de
expectativas aumenta la frustración.
- Está creciendo también la demanda de desempleados de más
de 45 años.
- Desempleados recientes procedentes de empleos de baja
cualificación de los sectores de la construcción, la
hostelería y, más recientemente, de la industria. Muchos son
inmigrantes que tenían autorización de trabajo. Empiezan a
agotarse las prestaciones por desempleo, por lo que, o bien
acceden al cobro de algún subsidio o entran en una situación
de “ingreso cero” en los hogares.
- Familias jóvenes (20 a 40 años de edad) con niños
pequeños.
- Mujeres solas con cargas familiares --generalmente no
compartidas-- y con problemas de conciliación entre vida
familiar y laboral.
- También cada vez más se atiende a hombres solos, de más de
45 años, separados o divorciados, que están en paro y no
pueden afrontar el pago de un lugar donde vivir. El sistema
social público, al no tener cargas familiares, deja a estas
personas prácticamente fuera de su ámbito de atención.
- Aparecen casos de mujeres mayores con pensiones no
contributivas o pensiones mínimas que no llegan a cubrir
necesidades básicas. En muchos casos, soportan el peso de la
familia extensa.
- Inmigrantes en situación irregular (menores y jóvenes que
ven endurecidas sus condiciones de vida).
- Familias inmigrantes con deudas de hipotecas, alquileres o
incluso de préstamos personales elevados que demandan
también alimentos y ropa.
- Mujeres inmigrantes que buscan trabajo por primera vez,
sin formación ni cualificación, que apenas han salido del
núcleo familiar, que vienen a Cáritas a buscar acceso al
empleo, principalmente como empleadas de hogar –acompañadas
de un marido que acaba de quedarse en paro-- para sacar
adelante la maltrecha economía familiar. También hay un
incremento de mujeres inmigrantes solas con varios hijos a
su cargo, cuyos maridos han regresado a su país de origen a
buscar trabajo, y que carecen de medios económicos y de
redes familiares de apoyo.
- Familias inmigrantes en situación de vulnerabilidad con
serias dificultades para acceder a las prestaciones
sociales, especialmente a los salarios sociales o rentas
mínimas de inserción, porque no tienen permisos de
residencia o porque se han endurecido los criterios de
concesión que afectan a la población inmigrante.
- Actualmente vienen a Cáritas grupos de personas
inmigrantes que viven juntas en un piso y solicitan apoyo
económico de forma conjunta, dado que la ayuda mutua ya no
es posible porque están todos en paro y han agotado las
prestaciones. Suelen ser hombres solos que están en una
situación muy precaria.
• Aspectos singulares de las FAMILIAS y ciudadanos
AUTÓCTONOS.
- Aumento de familias y personas con nacionalidad española
en situación de vulnerabilidad, con cabeza de familia varón
en paro (mayor de 40 años), con hipotecas o créditos
personales a los que no pueden hacer frente. Vivían con lo
justo, sin recursos para ahorrar, y han agotado los apoyos
familiares, las prestaciones por desempleo; incluso,
trabajan en actividades de economía sumergida y acuden a
Cáritas a solicitar ayuda económica para afrontar
necesidades básicas: vivienda, alimentación, acceso al
empleo, ayuda psicológica, y para libros de texto o material
escolar.
- Entre ellos hay muchos autónomos de pequeños comercios y
talleres que han tenido que cerrar al quedar arruinados y
con muchas deudas a trabajadores, proveedores, impago de
clientes, créditos no pagados, etc…
- Familias cuyo cabeza de familia es trabajador público y se
ven afectadas por los impagos de los Ayuntamientos.
• Aspectos singulares de las FAMILIAS y ciudadanos
EXTRACOMUNITARIOS.
- Aumento de familias y personas inmigrantes regularizadas
-con autorización de residencia y trabajo- que se quedan en
paro, procedentes de empleos de baja cualificación (del
sector de la construcción, hostelería, trabajo doméstico y
del transporte), donde estaban en una situación laboral más
o menos “estable”. No obstante, también hay desempleados
relativamente cualificados del sector de la construcción.
Ahora, con el impacto del paro, tienen dificultades
económicas para afrontar necesidades básicas (alimentación,
ropa) y las pocas veces que logran acceder al mercado
laboral lo hacen de manera breve, inestable (sin contrato y
sin cotizar a Seguridad Social) y con baja remuneración.
Incluso se detectan personas que continúan trabajando sin
sueldo, pero manteniendo la cotización para no perder
derechos.
- En todo el Estado se han endurecido las condiciones
administrativas en los procedimientos de renovación, de
reagrupación y de arraigo social. Además, muchos tienen
serias dificultades para afrontar el pago de las tasas
administrativas de estas tramitaciones.
- Los que tienen que renovar la Autorización temporal de
residencia y trabajo están en GRAVE RIESGO de pasar a la
irregularidad administrativa porque pese a que se han dado
pasos para flexibilizar la renovación, se agotan los plazos
para encontrar trabajo. Esta nueva situación de
irregularidad no solo afecta a los trabajadores extranjeros,
sino que condiciona también a sus familias.
- Inmigrantes en situación administrativa IRREGULAR que
siguen demandando ayuda. Al no tener documentación (permiso
de residencia y trabajo), es muy difícil su acceso al
trabajo, con lo que su situación es cada día más
desesperante. Algunos llevan “asentados” en España hasta 8
años y, por distintos motivos, no han podido regularizar su
situación. Son los inexpulsables.
¿QUÉ HEMOS HECHO DESDE CARITAS PARA AYUDAR A LAS VÍCTIMAS
DE LA CRISIS?
Las causas del aumento de las demandas son especialmente: la
falta de liquidez en las familias por un exceso de
endeudamiento; el paro prolongado y el fin de las
prestaciones por desempleo; y la insuficiencia de los
servicios sociales públicos, con especial mención a los
retrasos en la tramitación y cobros de rentas mínimas.
La principal incidencia de la crisis en los programas y
servicios de Cáritas está directamente relacionada con el
incremento de ayudas solicitadas, que supera las
posibilidades de muchos equipos de atención primaria y que
está provocando una transformación
- Se ha producido un aumento de las personas que llegan a
nuestra red de servicios de acogida y atención primaria,
derivados por parte de los servicios públicos. Son casos de
primera necesidad, en los que los servicios públicos
recurren a nuestra red, bien por que carecen de ayudas
económicas directas y urgentes, bien porque dan por supuesto
que Cáritas va a ofrecer esa ayuda de emergencia, o bien
porque las personas no cumplen los criterios o requisitos de
acceso establecidos por los servicios públicos para recibir
esa prestación.
- Se ha tenido que hacer un esfuerzo para atender el aumento
de las intervenciones de asistencia más urgentes.
- El ritmo de las acciones de inclusión social y desarrollo
personal, con el seguimiento y acompañamiento necesarios se
ha ralentizado. Los procesos de promoción son más largos.
- Los propios agentes de Cáritas se ven desbordados, e
impotentes ante la dureza de las situaciones que se les
plantea en el día a día.
Con la Campaña Cáritas ante la crisis, tratamos de
sensibilizar al conjunto de la población sobre la dramática
situación que viven todas estas personas, vidas concretas
que necesitan esperanza, nuestra solidaridad y nuevas
oportunidades para salir adelante.
Con las ayudas que se han recibido, se constituyó, en el
primer semestre de 2009, un fondo económico especial
destinado a paliar las necesidades económicas de las
personas que llegan a los equipos de acogida de cada Cáritas
Parroquial: Fondo Crisis. A lo largo de estos tres años se
han realizado diversos repartos monetarios a las Cáritas
Parroquiales que han solicitado apoyo económico para hacer
frente a dichas necesidades.
El importe total recaudado en el Fondo Crisis en los años
2009 – 2011 ha ascendido a 165.160 €, como aportaciones
específicas para las nuevas situaciones de pobreza
consecuencia de la crisis. Esta cantidad está compuesta por
las donaciones particulares, por las aportaciones realizadas
por Cáritas Española y por las aportación especiales que ha
hecho la Conferencia Episcopal Española.
• ¿QUÉ AYUDA OFRECEN NUESTRAS CARITAS PARROQUIALES?
Desde Cáritas estamos realizando un apoyo integral a estas
familias, donde no solo de cubrimos las necesidades básicas
que presentan (asistencia) sino que nos preocupamos por
apoyar, dar un impulso, a estas personas para que puedan
caminar solas (realizamos un trabajo de promoción).
La parroquia es la puerta de entrada a Cáritas de la
persona. Normalmente, es la mujer o madre de familia la que
llega a Cáritas solicitando ayuda pero desde un primer
momento, nuestro objetivo es la intervención familiar.
El equipo de Cáritas Parroquial acoge, escucha y valora la
situación que presenta la persona. Lo hace a través de
entrevistas continuas, visitas domiciliarias… En este
proceso que comienza la persona no estamos solos. Trabajamos
en coordinación con Servicios Sociales, manteniendo
reuniones periódicas de coordinación, donde analizamos
situaciones de personas que se atienden en común y
complementamos la ayuda que la Administración ofrece. El
objetivo es lograr una atención de calidad, coherente y que
logre la autonomía de la persona. Al igual que con Servicios
Sociales, tenemos la obligación de coordinarnos con
cualquier otra Entidad que trabaje con el colectivo.
Las ayudas más demandadas son apoyo en alimentación, pago de
alquileres, pago de suministros, equipamiento personal…
• Desde la Red de Acogida y Atención primaria,
fundamentalmente se ofrecen ayudas económicas y de
alimentación.
- El 100% de las Caritas Parroquiales ofrecen ayudas en
alimentación y ayudas económicas.
- El 75% ayudas de equipamiento personal (ropa, calzado,
productos de aseo…)
- El 46% Otras ayudas – Apoyo a la formación, material
escolar, becas…etc.
Concepto de las ayudas económicas
- 82% Suministros
- 79% Farmacia
- 59% Ayudas de desplazamiento
- 20% Ayudas escolares o para formación.
• ¿FAMILIAS ATENDIDAS Y RECURSOS INVERTIDOS?
• El número de personas atendidas se ha multiplicado en los
últimos años. Se ha pasado de atender a 4.000 familias en el
año 2008 a atender alrededor de 9.000 familias en 2011.
• En cuanto a las inversiones anuales destinadas a ayudas
directas, y con la información económica del 40% de las
Cáritas Parroquiales, en estos años se ha invertido en la
red de acogida y atención primaria 1.215.273 euros.
• Inversión del Fondo Crisis: 165.160 euros.
(Total: 1.380.433 euros para ayudas directas a las
familias).
LA RED SOCIO - LABORAL.
Pero, como comentamos anteriormente, la labor de Cáritas no
debe quedar solo en la asistencia; estamos obligados a
trabajar de manera promocional con las personas que
atendemos. Los servicios de acogida y atención primaria:
o Ofrecen servicios desde un territorio cercano a las
personas, que permiten realizar la atención primaria
comprendiendo todas las dimensiones de los problemas y que
nos de la posibilidad de coordinar con otros servicios,
tanto públicos como privados.
o Atienden a las personas pensando en futuro próximo
intentando la inserción sociolaboral y la prevención de
situaciones más graves. Las distintas ayudas que se ofrecen
son realizadas como un apoyo, refuerzo, que prevenga y ayude
a la integración social.
o Desde los Servicios de Acogida y atención primaria, se
“promueve el camino de las personas”
En Cáritas hemos buscado siempre ir a las causas de la
pobreza y no sólo actuar sobre las consecuencias. Por eso,
en este tiempo de crisis donde la pérdida del empleo ha sido
una de las mayores causas de nuevos pobres, Cáritas ha
reforzado su labor con la RED SOCIOLABORAL que, en materia
de empleo, ya lleva años desarrollando. Y así, con ilusión y
esfuerzo, se han puesto en marcha cursos formativos
enfocados a la incorporación laboral de mujeres jóvenes en
riesgo y/o exclusión social y se ha descentralizado la
acción de empleo, abriendo nuevos servicios donde ofrecer
Información, orientación y formación para el empleo. La Red
Sociolaboral dispone ahora de 7 Puntos de Integración
Sociolaboral.
En 2011 se han atendido más de 800 personas, de las cuales
128 han encontrado un empleo.
LAS PERSONAS QUE TRABAJAN EN CARITAS.
Las nuevas situaciones de pobreza que ha generado la crisis,
han supuesto que, el voluntariado de Cáritas, tenga que
replantearse su formación y su metodología de intervención.
Para ello, se han reforzado los planes formativos y el
acompañamiento del voluntariado y se están revisando los
servicios de acogida parroquiales para actualizar y
optimizar su atención a los más pobres.
CONCLUSIONES:
Cáritas, la Iglesia, está llamada por su vocación a atender
a las personas que sufren cualquier tipo de vulneración de
sus derechos. La acción de Cáritas es una respuesta
voluntaria que nace de la fe en el Dios de Jesús de Nazaret.
Esta vocación tiene un carácter marcado fundamentalmente por
la idea de liberación integral de la persona tal y como lo
hacía Jesús de Nazaret. Cáritas no ejerce la ayuda a las
personas de forma que solo actúe sobre las consecuencias
(pobreza y exclusión) sino que busca, además, soluciones a
las causas que las provoca.
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