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La Guardia Civil ha interceptado la pasada madrugada en
aguas de Melilla una patera con 21 inmigrantes subsaharianos
a bordo, de los que tres eran mujeres embarazadas y dos
menores, uno de ellos neonato, según han informado fuentes
oficiales a los medios de comunicación.
Los inmigrantes fueron interceptados a la altura de la
dársena del Puerto Comercial en una embarcación impulsada a
motor.
La embarcación ha partido desde las cercanas playas de
Marruecos para alcanzar suelo español con el objetivo último
de ser trasladados a la Península después de un periodo de
tiempo, que suele ser largos -de entre uno y tres años-, a
no ser que sean finalmente repatriados a sus países de
origen.
De los componentes de la patera, había trece hombres y seis
mujeres, estando tres de ellas embarazadas, además de dos
menores, uno de ellos recién nacido.
Una vez que se ha abierto expediente de expulsión, en
aplicación de la Ley de Extranjería, han sido acogidos en el
Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) mientras
se cumple este trámite, que muchas no se puede concluir ante
la posibilidad de proceder a la repatriación.
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