El Gimnasio Ceuta Goyu-Ryu se encuentra en una delicada
situación que tiene difícil remedio. El equipo caballa se
encuentra a siete puntos de los puestos de permanencia
cuando son sólo cinco las jornadas que quedan por
disputarse. Un proporción negativa que empeora aún más
teniendo en cuenta de que a los ceutíes les quedan por
disputar sólo dos partidos en el José Benoliel, mientras que
los otros tres los jugará a domicilio.
Una situación a la que se ha llegado por “algunas
decisiones”, la “mala suerte” y “sobre todo, por las
actuaciones arbitrales” que el cuadro caballa “ha sufrido”
en casa. Así, Mohamed Amar, aseguró que “si los arbitrajes
hubiesen sido como tenían que ser” su equipo contaría
actualmente con “ocho o diez puntos más” que les permitirían
estar situados en puestos de permanencia. Una situación que
“más o menos” ha sido la tónica habitual esta temporada para
el resto de equipos que militan en categoría nacional,
reconociendo, sin embargo, que “a algunos equipos se les ha
arbitrado con más mala leche”.
Lo que “teme” en estos momentos el presidente del Goyu-Ryu
es que arbitrase “de otra manera” a uno de los equipos de
Liga Nacional (refieriéndose a la UA Ceutí), algo que le
parecería “indignante”. Así, Mohamed Amar, que aseguró
hablar “con conocimiento de causa”, declaró que un árbitro
ceutí le admitió a un directivo de su equipo que “a partir
de ahora, las instrucciones eran otras”.
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