Con el permiso de la boca, (la masticación y preparación del
bolo digestivo en la boca es un asunto que trataremos en
otra ocasión), el estómago es fundamental en el proceso
digestivo, que no es poca cosa. Es el órgano encargado de
procesar los alimentos hasta dejarlos preparados para ser
absorbidos en el torrente sanguíneo, bien en sus propias
paredes, o en las paredes intestinales.
La manera de trabajar del estómago es, cuanto menos, un poco
drástica, la combinación de ácido clorhídrico y pepsina que
segrega a través de los jugos gástricos alcanza unos niveles
súper ácidos de pH, basta con ver como el vómito de una
persona es capaz de corroer el mármol provocándole una
huella. Los ácidos del estómago tienen, por si solos la
capacidad de pulverizar cualquier órgano interno con el que
se topen, lo único que nos “protege” de nuestro estómago es
una pared especial para resistir esos ácidos tan poderosos,
esta es la mucosa gástrica, así, que más nos vale cuidarla
si no queremos sufrir los despiadados ataques de nuestros
ácidos en forma de gastritis o úlceras.
Es decir, nuestro primer frente de ataque a la hora de
cuidar nuestro estómago, será el cuidado de la mucosa
gástrica, como anticipo les anuncio que los fritos, el
alcohol, el tabaco, las bebidas carbonatadas y algunos
medicamentos no son muy amigos de dicha mucosa.
El segundo frente, y no menos importante, lo abriremos en la
propia fisiología y dinámica del estómago, y es que, como ya
adelanté el fin de semana pasado … nos pasamos con nuestro
pobre órgano, en general lo hacemos con todo el aparato
digestivo, pero al estómago le “damos cera” sin piedad.
El estómago es un órgano diseñado para albergar la cantidad
necesaria de nutrientes para nuestro organismo, y su tamaño
debería ser el de una pera grande aproximadamente, pero, al
ser elástico, tiene la capacidad de agrandarse, y, vaya si
se agranda, hay personas que lo ensanchan hasta casi llegar
a la pelvis, y eso ocurre cuando el volumen de alimentos
ingerido es enorme. Ojo, no tiene ninguna relación el
volumen ingerido con los nutrientes asimilados, hay
infinidad de alimentos muy jugosos y apetecibles que apenas
tienen valor nutricional. La propia acción de los jugos
gástricos sobre los alimentos produce gases, de manera que
llenar el estómago “hasta las cejas” es un terrible hábito,
ya que al producirse estos gases no tienen a donde escapar,
con lo cual, comienzan a dilatar el estómago, o bien a
provocar esos temibles reflujos, ardores y demás dolencias.
Esto sin tener en cuenta la naturaleza de los alimentos
ingeridos, grasas, gases, alcohol… en resumidas cuentas, una
bomba, o peor aún, hay quienes no dan descanso al estómago,
otro hábito absolutamente insano, no dando tregua al
estómago. Tengan en cuenta que cada mínima porción de comida
que ingerimos, activa todo un mecanismo de secreción de
ácidos y digestión en general, el “picoteo” es especialmente
dañino para el estómago. Es recomendable hacer cinco comidas
diarias pero espaciadas al menos tres horas entre ellas,
cuando digo cinco, no me refiero a cinco comilonas, me
refiero a comidas ligeras, desayuno, media mañana y merienda
a base de fruta y almuerzo y cena con un poco mas de
hidratos, verduras y proteínas.
Lo que voy a exponerle a continuación es, primero un listado
de alimentos recomendables para cada afección, y después una
serie de menús diarios para personas que ya están padeciendo
alguna de las afecciones.
Debido a la escasez de espacio, tendré que exponérselos de
manera muy escueta, de todas formas, en cuestión de dietas,
nunca les recomendaré yo que hagan una dieta sin supervisión
alguna por parte de un especialista, eso es una insensatez,
además de la línea, debemos tener regulados otros muchos
niveles que si se degradan nos pueden ocasionar males
mayores. De modo, que esto NO SON DIETAS, ni seré yo el que
publique una dieta generalizada, “lo que comes, es lo que
eres”, y jugar con eso es una “ruleta rusa”, perder peso es
fácil, pero salir ileso de dicho proceso, no lo es tanto.
Por afecciones estomacales, yo les recomendaría ingerir los
siguientes alimentos:
RECOMIENDO
-ESCASEZ DE JUGOS, (DIGESTIONES PESADAS)
Condimentos que favorecen la secreción de jugos sin irritar
las paredes, por ejemplo: Limón. Ajo y algunas Plantas
Aromáticas citadas en el anterior artículo del estómago.
Pimiento verde dulce asado o crudo (nunca frito)
Piña, es fantástica, ya que contiene enzimas, especialmente
la bromelina que facilita la digestión de las proteínas,
compensando la escasez de jugos.
-DISPEPSIA (ERUPTOS, MALESTAR O DIGESTIÓN ABDOMINAL Y
ACIDEZ)
Cereales integrales, Ensaladas pero no engullidas, sino
crudas y bien masticadas, Calabaza, Hinojo, que gracias al
anetol que contiene tonifica las digestiones pesadas
Para la dispepsia, además hay que cambiar hábitos como la
masticación insuficiente, la irregularidad de horarios de
comidas y el estrés o tensión nerviosa.
-GASTRITIS, (INFLAMACIÓN DE LA MUCOSA ESTOMACAL)
Patata (cocida o asada), Avena, Arroz, Tapioca, Zanahoria,
Aguacate, Calabaza, Chirimoya, Manzana.
-ÚLCERA GASTRODUODENAL
En relación a esta dolencia hay todo un compendio de ideas
erróneas:
Siempre se ha dicho que consumir mucha leche es bueno para
la úlcera, que actúa como una película que protege las
paredes, algo de cierto tiene, pero en contra tiene un
factor demoledor, las leches enteras contienen mucha grasa,
el peor enemigo de la úlcera, ya que sube la acidez, así que
leche si, pero desnatada.
Comer poca cantidad y muchas veces en este caso también está
desaconsejado, ya que un paciente de úlcera, lo que menos
necesita es estrés en el estómago. Es más importante lo que
comemos, y como lo hacemos, bien masticado y ensalivado para
comenzar a digerir en la boca, aquí es donde enlazo con otra
creencia errónea: evitar la fibra y los alimentos crudos,
eso es falso, lo que pasa es que si no los masticamos bien
provocan molestias.
Para la úlcera van muy bien los siguientes alimentos:
Col, es fantástica, al igual que la coliflor y el brócoli,
bien crudas, o el jugo de una suave decocción, todos ellos
son cicatrizantes y antinflamatorios, Pata, Avena, Tapioca,
Miel, Fibra de cereales integrales, legumbres, hortalizas o
frutas; Vitamina A de la Zanahoria, Verduras o Mango para
cicatrizar; Vitamina C, lo ideal sería tomar cítricos, pero
si no son bien tolerados, tenemos el Kiwi, Acerola y
especialmente el Pimiento Rojo dulce que es el que mas
tiene.
-HERNIA DE HIATO
Por favor, pacientes de hernia, sentaos bien, no presionéis
aún más la boca de vuestro estómago doblando la espalda,
esto es fundamental y fácil de resolver. Aparte de este
consejo, os recomiendo, otra vez, la Patata y la Zanahoria.
También es muy interesante comer Granadas y especialmente
Algas, sobre todo Fucus.
DESACONSEJO
En este apartado incluiré todo lo que es dañino, porque
suele serlo para todas las afecciones, salvo contadas
excepciones:
Fritos, estos son terroríficos, el calentamiento del aceite
provoca toxinas que son especialmente dañinas para el
estómago.
-Especias, no todas, pero en general, las comidas muy
especiadas, especialmente picantes, son dañinas.
-Alcohol, una auténtica bomba doble, porque el alcohol no se
conforma con el estómago, además ataca al páncreas que
también produce jugos gástricos.
-Café, nosotros no podemos digerir la cafeína, lo hacen unas
bacterias que están en nuestro intestino, así que esa
cafeína permanece durante la digestión, irritando el
estómago.
-Refrescos (bebidas carbonatadas), otra bomba, además de la
ingente cantidad de gas, están los azucares refinados.
-Marisco, Chocolate, y en general, el Exceso de Grasas, son
terribles.
-Cerveza, devastadora para el estómago, además del daño del
alcohol, para rematarlo, carbónico, las “cervecitas”,
especialmente las de mediodía, se cobran infinidad de
estómagos entre sus víctimas.
Azúcares refinados, esos blancos son caldo de cultivo de
multitud de bacterias que irritan las mucosas.
Helados, y, en general, el frío intenso es demoledor en el
estómago, provoca que los vasos sanguíneos se compriman, lo
que enlentece la digestión, más tiempo de digestión, mas
irritación. Tampoco debe comer caliente, y después frío, si
la ensalada va primero es por algo.
-Cítricos, si bien son muy saludables, en el caso de
pacientes con gastritis, deben abstenerse, al igual que de
el Vinagre.
-La Piña, en general, es fantástica para el estómago, salvo
en el caso de una úlcera activa, entonces deben evitarla.
MENÚS RECOMENDABLES PARA AFECCIONES DEL ESTÓMAGO
Gastritis
Desayuno: batido de aguacate; copos de avena hervidos con
leche de soja. Endulzar
Con un poco de miel; chirimoya.
Almuerzo: jugo de col; ensalada de brotes; crema de
calabaza; arroz con leche.
Cena: acelgas con patatas y calabazas; macedonia tropical;
infusión de regaliz y anís
Verde.
NOTA este es un menú de protección gástrica, el cual ayuda a
que el estómago se recupere después de haber sufrido una
agresión (bebidas alcohólicas, un abuso de helados,
medicamentos…)
Úlcera gastroduodenal
Desayuno: kiwi y mango; tapioca hervida en leche de almendra
y endulzada con miel ,( si es posible miel de manuka).
Almuerzo: ensalada oriental; crema de puerros; patatas
asadas; pan integral y yogur natural desnatado.
Cena: sopa de col y manzanas asadas.
NOTA se trata de un menú antiulceroso, que ayuda a
neutralizar el exceso de ácido y a cicatrizar la úlcera
gastroduodenal. El mango, la tapioca y la patata actúan como
antiácidos, mientras que la col es cicatrizante.
Dispepsia
Desayuno: agua de ananás (piña tropical) papaya; avena.
Almuerzo: jugo de zanahoria y tomate; hinojo crujiente;
patatas con guisantes; pan
de centeno y tila aromática.
Cena: refresco de granada; platillo de maíz
NOTA los ingredientes de este menú facilitan la digestión en
caso de dispepsia, además de proteger el estómago. La piña y
la papaya contienen enzimas digestivas y la avena suaviza y
desinflama el estómago.
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