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La Consejería de Servicios Comunitarios y Barriadas, con
Gregorio García Castañeda a la cabeza, tiene previsto que a
mediados de este mes sean retirados del depósito de Benzú un
total de 100 vehículos, los cuales serán llevados a la
planta de descontaminación. El consejero resalta la buena
marcha de los trabajos.
La Consejería de Servicios Comunitarios y Barriadas, con
Gregorio García Castañeda a la cabeza, tiene previsto que a
mediados de este mes sean retirados del depósito de Benzú un
total de 100 vehículos que serán llevados a la planta de
descontaminación. Con estos trabajos y la “agilización de
los trámites administrativos”, García Castañeda reitera su
opinión de que se no se va producir ningún colapso más en la
planta. “Se está trabajando de forma conjunta con el gerente
de la sociedad Amgevicesa -Antonio Díaz- para dar más
celeridad a los procedimientos”. De este centenar de
vehículos, algunos son abandonados y otros pertenecen a los
juzgados, de los cuales ya se han tomado todas las
diligencias pertinentes, comentaba el consejero del área.
Desde que Servicios Comunitarios se hiciera con la gestión
del depósito de vehículos, García Castañeda ha tomado
diferentes medidas, una de las más destacadas fue la de la
penalización diaria de los dueños de vehículos que abandonen
su coche en plena vía pública. El consejero ya explicó que,
en este sentido, el procedimiento de actuación es sencillo
-tal y como informó este diario en su edición del pasado día
9 de enero-: cuando un vehículo se encuentra abandonado en
la calle y es trasladado tras la denuncia pertinente de la
Policía Local al depósito, se informará al ciudadano
propietario de que su coche se encuentra en las
instalaciones de Benzú. Se le enviará una notificación para
que se persone en el depósito y entregue la documentación
del coche, el cual se dará de baja de forma gratuita si los
papeles se presentan en un plazo de “cinco días”.
En caso contrario, a partir del quinto día, si el
propietario no ha aparecido, deberá pagar las tasas de
permanencia en el depósito, es decir, unos 8 euros al día.
En el caso de que el coche permanezca los ochenta días
legales hasta ser llevado a la planta, se cobrarán todos los
días y también la grúa, unos 60 euros. El objetivo es que el
dueño vaya al depósito, dé de baja el coche de forma
“gratuita” y así los trámites sean más rápidos.
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