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El grupo parlamentario Caballas criticó ayer las “formas” en
las que se han trasladado las medidas de recorte adoptadas
por el Ejecutivo local el pasado lunes. Y es que, según la
coalición, la iniciativa ha llegado “tarde, mal y de forma
sesgada”. “Ese gran señor que era Vivas parece que se cae;
todo era mentira, sólo quedan deudas”, afirman.
El grupo parlamentario Caballas criticó ayer las “formas” en
las que se han trasladado las nuevas medidas adoptadas el
pasado lunes en Consejo de Gobierno en relación a la
reestructuración de las sociedades municipales y un nuevo
plan de sostenibilidad presupuestaria. Y es que, según el
portavoz Mohamed Alí, estas medidas han llegado “mal, tarde
y de forma sesgada” a los grupos de la oposición y los
sindicatos. “Se muestra el carácter totalmente
antidemocrático del Gobierno a la hora de tratar los asuntos
de interés general”, remarcó Alí.
Para la coalición, esta iniciativa del Ejecutivo local “es
una falacia y una artimaña” ya que “es rotundamente falso
que se hable de reestructuración del sector público puesto
que “lo único que se hace es equiparar empresas cuyo objeto
social no tiene nada que ver entre ellas y así se intentan
maquillar los números en Madrid”, aseguró.
“No es normal que una ciudad autónoma como es Melilla no
llegue a los 200 empleados de empresas municipales y en
Ceuta haya cerca de 800”, comentó el diputado, quien
consideró que esta situación “ha creado revuelo en Madrid” y
el presidente Vivas “no dispone de una explicación rigurosa
para justificar esta política clientelista en los últimos
diez años”.
Presupuestos de la Ciudad
En relación al nuevo plan de “austeridad”, Alí criticó que
“no es el primero aprobado por el Gobierno” e instó a que el
Ejecutivo “se mire un poco el ombligo y analice por qué los
planes aprobados en años anteriores no han dado resultados y
no han sido eficaces”, continuó y añadió: “Es totalmente
deseal, injusto e irresponsable aprobar un plan cuando hace
un mes se dio luz verde a los presupuestos de la Ciudad”.
Los diputados de Caballas no entienden el por qué de no
incluir estas medidas en el documento del mes de diciembre.
Además, “muchas de las iniciativas que se incluyen en este
plan de austeridad” fueron propuestas por el grupo de
Caballas “para enmendar los presupuestos generales”. “En ese
momento no eran necesarias y no estaban justificadas, e
incluso fueron denostadas”, ironizó el diputado.
En definitiva, Alí considera que “alguien” en la Ciudad
“debe asumir la responsabilidad de la nefasta gestión en
materia económica que se está padeciendo”. “Todo era
mentira; ese gran gestor que era el señor Vivas parece que
se cae; el mito se muere y lo que subyace son deudas,
irregularidades y que no haya fluidez a la hora de afrontar
los problemas que tienen los ceutíes desde una perspectiva
económica”, recalcó. Caballas quiere interpelar al Ejecutivo
local en el próximo Pleno de la Asamblea sobre “qué es lo
que va a pasar con los ficticios 8 millones de euros que se
inventaron Vivas y Márquez para incluirlos en el capítulo de
ingresos y cuadrar sus presupuestos”.
Esta cantidad “está supeditada a muchísimas cuestiones
sociales y, si se tiene en cuenta lo que se está viviendo,
van a caer en saco roto”, apostilló el portavoz del grupo
parlamentario.
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“El Ejecutivo cree que los ciudadanos son idiotas”
“El Gobierno utiliza siempre de
manera torticera sus presencias en el Consejo de Política
Fiscal y Financiera como coartada y vendiendo mensajes y
noticias que son falsos” ya que Ceuta “se rige en materia
económica por la Ley de Haciendas Locales, es un
Ayuntamiento y no tiene capacidad de asumir déficit
presupuestario”. Con estas palabras, el diputado Juan Luis
Aróstegui comenzó su alocución. “La deuda del Ayuntamiento
de Ceuta es de tal magnitud que se necesitan ir generando
recursos para ir pagándola poco a poco; no hay para pagar
las deudas y esto no es déficit, sino una bolsa de facturas
sin cosignación, de deudas de ejercicios anteriores y gastos
irresponsables”, ironizó Aróstegui.
“El intento de ahorro tiene su origen en que no se es capaz
de pagar las deudas que se tienen”, continuó. “Han
malgastado, despilfarrado y se ha hecho una campaña
electoral permanente durante 10 años”, resaltó.
Aróstegui también se cuestionó la eliminación de las
jornadas partidas y especiales de los funcionarios: “Se
supone que se han ido concediendo porque era bueno para los
ciudadanos; lo contrario sería aceptar que el señor Vivas ha
estado pagando a los funcionarios por un trabajo que no
hacían; esperemos que no sea a así”.
“Vivas tendrá que explicar por qué ha regalado el dinero de
los ceutíes caprichosamente”, aseguró. “Ha llegado un punto
en que el Gobierno cree que todos los ciudadanos son
idiotas; llevamos siete meses intentando que se diga cuánto
dinero se debe”, finalizó.
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