El director territorial del Ingesa, Fernando Pérez- Padilla,
ofreció ayer su apoyo incondicional a los trabajadores
afectados por el problema de incompatibilidad entre las
funciones que desarrollan en el Ingesa y la UGR. Aunque
considera que el problema ha pasado ahora a manos de la
universidad, mantiene una posición de ayuda para facilitar
las soluciones necesarias.
Aunque según sus palabras el problema de la incompatibilidad
entre trabajadores del Ingesa y su función como docentes en
la Facultad de Enfermería de la UGR ya no está en manos del
Ingesa, puesto que los trabajadores, ya han elegido quedarse
con el segundo, el director territorial del Ingesa, Fernando
Pérez-Padilla, ofreció ayer en rueda de prensa todo su apoyo
incondicional a la resolución del concflicto que esto ha
generado.
“Mis posibilidades ya son pocas porque ellos tienen que
elegir entre quedarse en la universidad o en el Ingesa, si
hubieran elegido quedarse en la universidad, hubiera
decidido contratar más enfermeros y no hubiera tenido
problema, pero como han decidido quedarse con nosostos el
problema es ahora de la universidad”, afirmó Padilla, que
consideró que el problema se extendía por tanto a la ciudad
autónoma, a la que ofreció su compromiso de ayuda para
cualquier solución temporal.
“Si hay algún tipo de solución en la que podamos ayudar en
la forma de cederles alguna hora o alguún acuerdo, he oído
profesores asociados, si eso llega a buen término, es legal
e implica alguna gestión por parte del Ingesa nosotros lo
vamos a apoyar, se lo vamos a facilitar, incluso aunque
económicamente no nos sea rentable”, manifestó el director
territorial, conocedor de la situación por su reciente
puesto como coordinador de equipo y con algunos de estos
enfermeros bajo su tutela.
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