Populares en Libertad (PPL) acusó ayer al Gobierno de
Melilla de intentar “socavar” y “dañar personal, política y
económicamente” la oposición que pueda ejercer su grupo y el
del PSOE con la reforma del Reglamento de la Asamblea, un
proyecto del que dijo que el Ejecutivo quiere aprobar a toda
costa antes de elaborar los Presupuestos de 2012. En rueda
de prensa, el presidente de PPL, Ignacio Velázquez, ha
acusado al Ejecutivo de Melilla de emprender esta reforma
con el único objetivo de eliminar un asesor al grupo
parlamentario de PPL, medida que también afecta al PSOE.
En rueda de prensa, el presidente de PPL, Ignacio Velázquez,
ha acusado al Ejecutivo de Melilla de emprender esta reforma
con el único objetivo de eliminar un asesor al grupo
parlamentario de PPL, medida que también afecta al Partido
Socialisto Obrero Español por tener los dos únicamente dos
diputados.
Velázquez ha acusado al presidente del Gobierno de Melilla,
Juan José Imbroda, de ser incoherente en la postura que
ahora mantiene sobre la eliminación de un asesor a PPL
respecto a la que tenía hace 12 años, cuando era portavoz de
la Unión del Pueblo Melillense (UPM), que estaba en la
oposición.
Video
Así, el presidente de PPL ha mostrado un video de 1999, en
el que Imbroda explicaba que había que modificar el
Reglamento de la Asamblea para permitir que los grupos de la
oposición pudieran hacer su labor fiscalizadora, por lo que
proponía que tuviera los medios técnicos y humanos
necesarios para ello.
En concreto, solicitaba que los grupos parlamentarios que
tuvieran de dos a cuatro diputados dispusieran de un
técnico, dos auxiliares administrativos y la posibilidad de
que uno de sus diputados se liberara, de modo que la
oposición tuviera “más presencia” en el funcionamiento de la
Asamblea.
“Por una vez y sin que sirva de precedente, estoy de acuerdo
con Imbroda”, ha dicho Velázquez tras mostrar el video a los
periodistas, si bien ha puntualizado que Imbroda pedía
entonces una modificación del Reglamento vigente, y PPL sólo
pretende que se cumpla lo que viene establecido en él y que
no se cercenen los derechos de la oposición.
Por ello, Velázquez ha exigido a Imbroda que sea “coherente”
con sus posiciones y que mantenga lo que defendía en el
pasado, cuando era portavoz de un grupo parlamentario que
tenía tres escaños.
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