Los enfermeros del SUAP piden una mejora en la seguridad,
después del suceso en el que se vio envuelta el domingo una
enfermera del SUAP, la cual fue víctima de una trifulca
familiar durante una asistencia domiciliaria en la barriada
de Los Rosales. SATSE y CSI.F han denunciado estos actos
violentos. Estos últimos piden que se cree una plaza para un
celador que acompañe al personal en los desplazamientos.
Los enfermeros del SUAP (Servicio de Urgencias de Atención
Primaria) se sienten “desprotegidos” y reclaman más
seguridad para los desplazamientos. La situación, denunciada
en anteriores ocasiones, ha vuelto a la palestra después de
que el domingo, según informó ayer este medio, una de las
trabajadoras, A.F.C., se viera envuelta en una pelea
familiar durante una urgencia domiciliaria en Los Rosales.
La enfermera fue violentada por los familiares, cuando el
hijo de una paciente, aparentemente drogado, no le dejaba
poner una inyección.
En cada turno del SUAP (abierto de lunes a viernes de 17 a 9
horas y fines de semana y festivos, 24 horas) trabajan dos
enfermeros, dos médicos, un celador y un vigilante de
seguridad. Cuando el 061 les requiere para una asistencia,
informa de si hace falta la presencia del médico. En caso
afirmativo, el facultativo acude junto a un enfermero; en
caso contrario -normalmente inyectables o cambios de sonda-,
acude solo el enfermero. “A veces viene un compañero, pero
por hacernos un favor”, apuntan los trabajadores, quienes
remarcan que, además, deben ir conduciendo ellos, una
situación que se agrava cuando alguno de los trabajadores no
tiene carné de conducir. El procedimiento cuando sucede una
situación conflicitiva es el de informar al 061 para activar
un protocolo que consiste en que si volviese a producirse un
aviso del mismo emplazamiento, el personal sanitario deberá
ser acompañado por la Policía. En el caso del domingo, la
enfermera explica que informaron al 061 y el coordinador del
servicio se puso en contacto con ella para ofrecerle su
apoyo.
Tanto el sindicato de Enfermería (SATSE) como CSI.F
lamentaron ayer la situación vivida por la enfermera.
Condenaron los actos de violencia y recordaron que han
pedido en numerosas ocasiones que se aumente la seguridad en
el SUAP.
SATSE pide a la administración “que ponga medios” y CSI.F
reclama la creación de una plaza para un celador conductor
que acompañe en los desplazamientos, especialmente en los
nocturnos y en las barriadas más conflictivas, con el fin de
evitar que se propicien estas situaciones.
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