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OPINIÓN - JUEVES, 24 DE NOVIEMBRE DE 2011

 

OPINIÓN / ANALISIS

Un largo mes sin Gobierno
 


Nuria de Madariaga
opinion@elpueblodeceuta.com

 

Ante la afirmación de que el nuevo Gobierno debería tomar posesión a la voz de “ya” porque la precariedad de nuestra economía y de otros extremos, no entienden de plazos institucionales, muchos podrían alegar que en Bélgica llevan un año y medio funcionando con un Gobierno provisional y que no obstante tienen un nivel de paro de tan sólo el 6% y su riqueza va en progresivo aumento, aunque la explicación es que los Gobiernos Autónomos de Flandes y Valonia está dirigidos por grandes gestores, por lo que serían capaces de “tirar” hasta años sin un Gobierno en Bruselas. Lo cierto es que ni somos belgas ni estamos en Bélgica y son los propios europeos, concretamente Angela Merkel y Sarkozy quienes andan azuzando a Mariano Rajoy para que apresure los trámites y comience a gobernar lo antes posible, obviando protocolos institucionales y demás innecesarias pamplinas. De hecho las normas se dictan para servir al ciudadano y no para que el ciudadano se encuentre al servicio de las normas y cuando una ley, un reglamento o una ordenanza no sirven ni de adecuan a las necesidades se reforman, porque para eso cobran los legisladores : para hacer y deshacer, respondiendo a necesidades concretas de circunstancias históricas concretas.

De hecho a muchos españoles nos gustaría que nos explicaran el motivo de no llevar a cabo algún tipo de modificación a tiempo real para agilizar todo lo posible la toma de posesión del Gobierno del PP. Ni caben excusas sobre falta de preparación para asumir ya el mando ni tampoco el que no se encuentre ya todo previsto en lo relativo al reparto de carteras ministeriales. La opinión generalizada es que, desde la primera encuesta que señalaba que el partido de Mariano Rajoy superaba en puntos al PSOE, el gallego ya tenía bien claro el “quien es quien” y a lo largo del tiempo, conforme las encuestas iban resaltando las diferencias y apuntando a la que ha sido una absoluta victoria, el Presidente Rajoy, hombre organizado donde los haya, poco dado a las improvisaciones y con el cuadriculado cerebro de registrador que le caracteriza, nos consta que iba realizando su futuro organigrama, eligiendo a su equipo y designando a cada cual para asumir una responsabilidad. ¿Y de qué se tiene que hablar esta semana? Pues de las quinielas ministeriales y hacer apuestas sobre quien será designado para según qué cargo. ¿El deseo común? Rodrigo Rato de superministro para que tome las riendas de la crisis. El resto que elija a quien apetezca. Menos para Justicia e Interior, porque Rajoy nunca debe olvidar que los españoles somos víctimas multiplicadas por dos: 1º De la crisis 2º De las putadas inenarrables de la inseguridad jurídica y la desintegración de los principios constitucionales. Porque “no solo de pan vive el hombre” sino también de derechos y garantías y de tener la libertad de vivir en paz y sin el miedo a la delincuencia, ni el miedo a “ser señalado” y caer en una macrooperación policial en conchabamiento con jueces “ad hoc”.

En España han existido más crisis que la económica. Y para decepción de muchos esta campaña se ha centrado en los cinco millones de parados y en que hay que incentivar a las pymes, los autónomos y los emprendedores. Perfecto para oírlo una vez, de hecho a la segunda vez te enteras mejor. Pero cuando van por la quinta se quiere preguntar si va a haber consecuencias para operaciones prefabricadas como la Ballena Blanca con cuarenta y tres detenidos y paseados con esposas ante las cámaras, diez en el banquillo y cinco condenados a penas menores. ¿Quien resarce a los inocentes? ¿Cuando se llevan por delante a la policía, el fiscal y el juez que perpetraron la tropelía? ¿Qué van a hacer con quienes ordenaron “linchar” a Marta Domínguez en la Operación Galgo que tanto juego y carnaza dio a las televisiones?. Los parados quieren pan. Y los perseguidos quieren justicia. Y que el artículo 14 de la Constitución, el Principio de Igualdad, alcance por igual a todos los españoles, comenzando por la Realeza porque son tantos sus privilegios que son los llamados a dar ejemplo y no a ser excluidos de cualquier responsabilidad penal. Que nunca olvide el PP que ha prometido “cambio y regeneración” y que para eso les hemos dado las riendas absolutas de los destinos de España, que son los nuestros y los españoles somos conscientes de que la crisis económica llevada a estos extremos por ignorancia supina de los gobernantes, esta situación, ha sido precedida por otros horrores-errores sobre los que se ha pasado de puntillas durante la campaña. ¿Cuando y cómo se va a hablar del nuevo Código Penal y de la nueva Ley de Enjuiciamiento Criminal y de la renovada Ley Orgánica del Poder Judicial, así como de la nueva Ley del Jurado? ¿Accederá el Gobierno al clamor popular que pide que jueces, fiscales, policías y políticos que hayan delinquido y defraudado la confianza del pueblo sean juzgados por la Ley del Jurado y que sea el pueblo el que haga justicia?.

Procelosa cuestión ¿Qué tipo de cambio de los cojones no comienza con la promesa de cambiar la perversidad de ciertas leyes y de quienes las manejan?.

¿Cuando se humanizará el Reglamento Penitenciario y en tema de beneficios no se hará lo que le salga a la Junta de Régimen de los huevos? ¿Cuando se pactará con la ciudadanía el nuevo método para la elección de los miembros de las carreras judicial y fiscal? ¿Cuando se clausurarán todos los calabozos de Juzgados y Comisarías de España si no cumplen los requisitos de que su estancia en ellos no conculque el Principio Constitucional que prohibe los tratos inhumanos, vejatorios y degradantes?. ¡Buena tarea tienen Rajoy y sus Ministros para merecer el jornal!

Porque ¿Se dan cuenta de que, pese a que el programa del PP toca infinidad de extremos estos puntos no se han tocado en la campaña a nivel nacional? Sí, el programa es un dulce y alcanza a muchos puntos, pero hay que leerlo y mejor que nos lo expliquen ya que el pueblo español es muy audiovisual y nos encanta que, ante las cámaras que tan bien han servido a los linchamientos del anterior Tenebrosistema, se proclame que los malos recibirán su escarmiento y las víctimas su recompensa.

Un mes sin Gobierno se va a hacer eterno. Hacen falta ya las famosas “medidas” contra la crisis económica y contra todas las demás crisis.Que han sido muchas. Y muy malas.
 

El lento y discreto ascenso de UPyD

Jacob Hachuel, candidato al Congreso y Samira Mohamed al Senado han llevado a cabo la campaña con menos recursos de Ceuta y con el obstáculo de no contar, por el momento, con representación en el Palacio de la Asamblea lo que significa que quienes representan el partido de Rosa Díez no se han beneficiado de la proyección pública de los grupos que integran la oposición.

Y no obstante la falta material de medios que llevó al propio candidato a tener que pegar sus carteles electorales y a ambos candidatos a desplazarse por Ceuta, sin más instrumento de captación que una mesa y un par de sillas para sentarse a charlar con los ciudadanos en plena calle y no siempre con un tiempo apacible, esa discreta labor ha dado sus frutos. De hecho casi han triplicado los resultados del año 2008 y les diferencia de Coalición Caballas, con toda su parafernalia y enfrentamientos, tan sólo 664 votantes. Cierto es que la personalidad de la socialdemócrata Rosa Díez y los fundamentos que sustentan su programa político que son sobre todo la reforma de la Ley Electoral y las competencias exclusivas del Gobierno de la Nación en Educación, así como la trayectoria personal de esta vasca que abandonó el PSOE, son capaces de atraer a una izquierda moderada que no comulga con el radicalismo hacia el que ha ido derivando el actual socialismo y se sienten más representados ideológicamente por la líder de UPyD que por Zapatero o Rubalcaba.

De hecho a la hora de elegir candidatos el partido de Rosa Díez apuesta por personas de prestigio dentro de una izquierda socialdemócrata que huye de los extremos y rechaza polémicas estériles, de ahí la elección de Hachuel y Samira Mohamed que han cargado en solitario con el peso de la campaña (y con la mesa y las sillas de sus improvisadas tertulias a pie de acera) financiándose con un sistema de bonos de 50 euros para afiliados y simpatizantes, sin posibilidad de practicar el mailing como el resto de los partidos y con un marketing casi artesanal. Contaban, también es cierto, con las ideas que Rosa Díez ha venido defendiendo a nivel parlamentario y con una proyección nacional de la rubia lideresa que es una política bien valorada en las encuestas, sobre todo y antes que nada por sus propuestas de eliminar las transferencia en Educación a las Comunidades Autónomas y que la competencia sea exclusiva del Gobierno de la Nación, dejando tan solo la gestión económica en manos de las Autonomías, pero no los programas académicos ni los contenidos. Sabia propuesta de una política capaz de ver la siniestra realidad educativa llevada a cabo por los Gobiernos catalán y vasco, donde no se ha educado sino intoxicado al alumnado con postulados nacionalistas y excluyentes. La Educación en manos de nacionalistas se convierte en adoctrinamiento, en forzar la inmersión en sus lenguas excluyendo el español de las aulas y fomentando en todo momento un sentimiento insolidario con el resto de España entre los más jóvenes. Las transferencias educativas en manos de radicales han venido fomentando durante años la intransigencia, el extremismo y una especie de independentismo rupturista que alcanza su máxima expresión en los vándalos de la kale borroka o en el independentismo catalán de extrema izquierda que practica el terrorismo urbano en sus piojosas manifestaciones antisistema. Como vasca y amenazada por ETA Rosa ha sido testigo directo de la corrupción educacional a la que han estado sometidos los niños en las ikastolas, conoce a fondo el asunto, ha padecido el antiespañolismo y sabe de lo que habla. Así que sus postulados residen en que las Autonomías se conformen con la gestión de los dineros de Educación, pero los contenidos y programas comunes a toda España y en español. Díganme si alguien puede rechazar una propuesta tan sabia y talentosa. Bueno sería en esta tesitura que, aun teniendo el PP una merecida mayoría absoluta que le hace no tener que estar de “¡Ja,ja,ji,ji!” con los logreros y chupópteros nacionalistas, sí se contara con esta política vasca que se mueve en un mundo de realidades auténticas y no en los universos virtuales de los nacionalistas “tó-pá-mi-net”.

UPyD cuenta con buen material humano, son gente seria pero no broncosa, correcta pero sin melindres, de izquierdas pero no religionófaba, trabajadora y enemiga de la moral de la subvención, pero antes que nada profundamente española. Todos nos alegramos de su avance y los analistas, observada la debacle del invento Caballas y la fuga de sus votos, ya auguramos a UPyD al menos un par de escaños en el Palacio de la Asamblea de aquí a cuatro años.
 

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