La AD Ceuta sufrió la cuarta derrota de la temporada en el
campo del un Cacereño que consiguió romper la buena racha
del equipo caballa, que llegaba al Príncipe Felipe enlazando
seis jornadas sin perder. El cuadro pacense le asestó el
primer golpe a los ceutíes cuando todavía no se había
cumplido el primer minuto de juego, después de que Santi
Amaro batiese por bajo a Pau Torres. La presión de recibir
el primer tanto cuando apenas había comenzado a echar a
andar el balón, y las malas condiciones del terreno de
juego, impidieron que los ceutíes pudiesen buscar el empate
con claridad, mientras que de nuevo Amaro, en el 18’,
aumentaba la ventaja con una jugada similar a la del primer
tanto. Tras un primer tiempo en el que el cuadro ceutí fue
incapaz de recortar distancias, los de Lobera saltaron al
maltrecho césped del Príncipe Felipe en la segunda parte con
las intenciones muy claras. A pesar de ello, sólo Álex
Hornillo, en el 78’, consiguió batir la portería defendida
por René, marcando el 2-1 con el que acabó el partido.
El encuentro no pudo empezar peor para el conjunto caballa.
A los cuarenta segundos de juego, un saque de banda que le
llegó a Álex en línea de fondo lo puso atrás para que Santi
Amaro fusilase por bajo a Pau Torres, marcando el 1-0. Los
de Lobera trataron de reaccionar, poniendo en práctica su
juego de toque, aunque las dificultades del terreno de juego
pronto les obligaron a buscar balones más directos a los
hombres de la mediapunta para tratar de llegar con el último
pase. La primera opción visitante llegó en una falta de
Germán que se marchó excesivamente alta. Los ceutíes también
consiguieron romper la línea defensiva cacereña en dos
ocasiones más, pero ni Añete ni Guzmán estuvieron finos de
cara a puerta, encontrándose con un buen René que se mantuvo
muy seguro bajo los tres palos.
En el 12’, el Cacereño pudo lograr el segundo en un buen
balón de Lolo sobre Álex, pero el joven ariete cacereño,
tras deshacerse de Pau Torres, no fue capaz de acertar a
puerta vacía. Tres minutos después, el Ceuta respondió con
una doble ocasión tras un disparo seco de Añete desde la
frontal que René envió a saque de esquina, tras cuya
ejecución Álex Hornillo cabeceó rozando el palo. Los ceutíes
se encontraban cada vez más cómodos sobre el terreno de
juego, hasta que en el 18’, en una acción parecida a la del
primer tanto, Dieguito ganó la línea de fondo y envió un
pase atrás que volvió a rematarlo con acierto Santi Amaro
marcando el 2-0 tras entrar desde la segunda línea.
Sergio Lobera pronto mandó a calentar a tres hombres para
tratar de dar un golpe de timón al partido. A pesar de los
dos goles en contra, el conjunto caballa, de rojo ayer,
trató de sobreponerse y con la entrada de Diego Segura, que
saltó al campo en sustitución de Guzmán, tuvo más mordiente,
aunque el césped dificultaba el fútbol, empeorando con el
paso de los minutos. Las siguientes ocasiones ante la meta
de René llegaron en un cabezazo de Hornillo a saque de
córner y en una llegada de Diego Segura, justo antes del
descanso, tras un buen pase de Aitor, que el portero pacense
consiguió despejar.
Tras la reanudación, el Ceuta salió con otra cara y tratando
de buscar sus virtudes: su juego combinativo. Creyendo en su
fútbol, tocando, corriendo y apoyándose lo que el terreno de
juego le permitía. Ya en el primer minuto se vio que la
intensidad y las ganas de finalizar las jugadas habían sido
motivo de comentario en el vestuario. Aitor probó suerte con
un disparo que solucionó bien René. Un par de minutos
después, el propio Aitor fue el que reclamó un penalti en el
área extremeña en una pugna con Gonzalo. Al Cacereño le
costaba entrar en juego y tuvo que replegarse para buscar en
el contragolpe su mejor alianza. Álex estuvo muy activo,
cabeceando en el 55’ un balón que despejó bien Pau Torres.
Al no crear ocasiones claras, el conjunto caballa optó por
un juego algo más directo, metiendo más mordiente en la zona
de ataque con la entrada de Fernando.
Aitor, el mejor del Ceuta en la tarde de ayer, tomó la
manija y la responsabilidad en la creación del juego
caballa, y también el mando en las jugadas de estrategia.
Una falta suya lanzada con mucha intención estuvo a punto de
sorprender a René tras cruzarse el ecuador del segundo
tiempo. El propio Aitor, en el 78’, fue el encargado de
lanzar otra falta en la que puso el balón en la cabeza de
Hornillo, quien sólo tuvo que peinar el esférico para
cambiar su trayectoria y recortar las distancias con el 2-1.
Con todavía diez minutos por delante, el equipo caballa
buscó el empate. Sin embargo, se encontró con un Cacereño
que se dedidicó a perder tiempo hasta el final del
encuentro.
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