Uno de los técnico del equipo benjamín de San Daniel
denunción ayer la agresión al portero de dicho equipo, de
ocho años de edad, durante el encuentro correspondiente a la
Liga Local que lo enfrentaba a La Inmaculada. Según el
entrenador, y padre del menor, el joven guardameta sufrió
durante el primer tiempo el impacto de dos piedras “de
tamaño considerable” lanzada presuntamente “desde la zona de
atrás a la que se encontraba, en la que sólo había adultos”.
Después de comunicar estos graves echos al colegiado del
encuentro, José Manuel Lladó, técnico del San Daniel
benjamín, tuvo que retirar al portero de su puesto, con las
pruebas en su cuerpo (costado y espalda) de los impactos de
las piedras. A pesar de ello, el árbitro decidió continuar
con el partido, aunque sí reflejó en el acta el hecho.
Lladó lamentó este grave inciente, denunciando
posteriormente la falta de seguridad que existe actualmente
en los campos de fútbol en partidos de estas categorías.
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