OPINIÓN - LUNES, 3 DE OCTUBRE DE 2011

El Presidente Vivas y Su Majestad

Nuria de Madariaga
opinion@elpueblodeceuta.com
 

Su Graciosa Majestad, que esa es la Reina de Inglaterra. El Rey don Juan Carlos que recibe hoy al presidente Vivas en la Zarzuela es tan solo Su Majestad y la visita es institucional y protocolaria dentro de la ronda de encuentros con los Presidentes de las Autonomías. Y a este acto en concreto se refirió Cerebrín Martínez, el Portavoz Popular en su última rueda de prensa adornando la información con varias parrafadas que,al igual que la simpar Nati Abascal es “lo más” de la elegancia, se puede decir quela alocución fue “lo más” de la corrección política y se habló de expresar inquebrantable lealtad al Monarca que viene a ser lo que expresan “todos” en “todas” las presentaciones por cuestión de cortesía. De hecho el encuentro de hoy no puede ser más previsible en cuanto a intercambio de frases bien medidas y seguimiento milímetro a milímetro de los dictados del protocolo. En los encuentros reales nada se deja al azar y no cabe la improvisación, tanto el Presidente Vivas como Su Majestad conocen de antemano cuestiones y respuestas porque ambas suelen ser muy previsibles y adecuadas al momento, la situación y las circunstancias. Recuerdo especialísimo a la ciudad de Ceuta por parte del Rey que lógicamente nos desea lo mejor y confía en nuestra capacidad para seguir avanzando dentro de la lealtad a España y a la Corona y protestas de lealtad a raudales y escuetas referencias a la crisis y puede que hasta el problema de la inmigración (Guillermo Martínez dice que no, yo opino que debería ser que sí) y la convivencia, la solidaridad, la cohesión social, las cuatro culturas más una quinta que son los chinos que también tienen derecho a contar y alusión al “Crisol de Culturas”. De hecho si los tiempos de las entrevistas con el Rey no estuvieran tan prefijados y cronometrados, lo mismo daba tiempo a que Juan Vivas se explayara con un cumplido relato de la realidad de esta ciudad y de los sentimientos de sus habitantes, pero no es posible, el protocolo manda y señala el saludo inicial con apretón de manos que el Rey suele adornar con unas palmadas en la espalda porque los Borbones han sido siempre muy espontáneos, los fotógrafos disparan las cámaras; luego el encuentro que no será largo con la exposición de Vivas y la respuesta real, ahí cabe otra foto con Juan Carlos y Vivas sentados y por fin la calurosa despedida y las declaraciones tras el encuentro por parte del Presidente de Ceuta que debe decir eso de “Quiero expresar mi satisfacción por este encuentro donde el Rey se ha interesado vivamente por los problemas de la ciudad, agradeciendo la lealtad que le dispensan los ciudadanos y felicitándonos por la multiculturalidad-convivencia- tolerancia-solidaridad y respeto entre las comunidades al tiempo que nos desea lo mejor de cara al futuro”. De hecho, si el Presidente Vivas no “expresa su profunda satisfacción” rompe las reglas y tritura lo políticamente correcto y si no se refieren ambos, Rey y Presidente ,a la multiculturalidad y a la convivencia y hasta al “crisol” parecería “faltar algo” porque aquí se tiene enjaretado un discurso que es un primor de buen tono. Y donde no se miente, porque en las diferentes comunidades hay gente muy culta que pueden aportar cultura que no cuatro atavismos folklóricos , los miembros de la comunidad hindú presentan una cultura milenaria que no dudan en compartir con todos, los musulmanes igual, los judíos saben latín y de hecho Jacob Hachuel acaba de regresar de Bulgaria de un encuentro con sefarditas, los chinos nos pueden presentar a Confucio y los Atapuerca´s traemos le leche celtíbera que es de santos, de guerreros y de poetas. Aquí se entremezclan la Toráh parida por los hombres de las estrellas con Siddharta y Jesús el Esenio, la filosofía griega, el derecho romano, el misterio de las catedrales, el descubrimiento de América, el Humanismo Cristiano y los más espectaculares avances científicos y tecnológicos. Raíces culturales tenemos para dar, regalar y sortear en la tómbola de la Historia. Por eso lo adecuado es referirse a la convivencia, cohabitación, coherencia, confraternización, cohesión y demás virtudes acrisoladas es decir, dimanantes del término “crisol” que rima con girasol que se deriva de sol y con respecto al astro rey no hay que obviar la realidad que aparecía escrita en el típico souvenir de “Ceuta, sol de España en África”. Pura sincronicidad, auténtico sincrodestino. ¿El resultado de la visita a la Zarzuela? “Profunda satisfacción” y no se diga más.
 

Una propuesta para la inmigración dentro del concepto de “emprendedor”

Nuria de Madariaga
opinion@elpueblodeceuta.com
 

Dicen y alegan los políticos que cualquier iniciativa o idea de los ciudadanos puede servirles. Y esta afirmación se entronca con el protagonismo que está alcanzando, en la campaña que se inicia, la figura de “los emprendedores”. Por “emprendedor” parece aludirse exclusivamente al profesional que “emprende” una actividad económica sea la realización de un negocio, la puesta en marcha de una industria, la apertura de un comercio o la creación de una empresa. De lo que se trata es “de ponerse en acción” para aportar el grano de mostaza, crear empleo con la actividad que se inicia y girar la rueda del progreso porque los empleados cotizan a la Seguridad Social al igual que el empleador, pagan sus impuestos y consumen, lo que hace que otros sectores prosperen gracias al consumo y que a su vez tengan que invertir para seguir funcionando. Y volvemos al tema de la crisis, del desempleo y de los parados de larga duración o “nuevos pobres” muchos de ellos que ni llegan a percibir la mínima renta social, de ahí que cuando se habla de “gastos sociales” la perspectiva de muchos ciudadanos se ciñe a ser capaces de ayudar de forma temporal a las víctimas de la situación económica y capacitarles para que vuelvan a integrarse en el sector productivo, porque no se trata de “regalar el pan” sino de potenciar las circunstancias favorables para que cada uno “se gane su pan”. Porque los Estados que funcionan a base de subvenciones a cambio de nada acaban haciendo “crack” ya que resulta insostenible. E injusto para los contribuyentes, porque no puede diseñarse una especie de sistema esperpéntico donde parte de la sociedad se esfuerce y sacrifique para subvencionar a la otra parte. Azuzar a los emprendedores y ofrecerles todo tipo de ventajas fiscales es un remedio más contra el problema de la crisis. Más que problema, problemón. Pero desde luego no el único al que se enfrenta la sociedad española en este breve plazo previo al comienzo de la nueva era o New Age de la regeneración.

Era en la que probablemente veremos a los legisladores echando humo por las orejas mientras acometen las necesarias reformas legales, es decir que también se requieren para la buena marcha del invento regenerativo a los “emprendedores legales” que sean capaces de adecuar las normas jurídicas y el Derecho a la situación actual. Y teniendo en cuenta que actualmente existen en España miles de extranjeros en paro o viviendo de la mendicidad en situaciones precarias. Y que por nuestras fronteras siguen entrando inmigrantes ilegales que saben perfectamente la situación calamitosa en la que nos encontramos y que no van a conseguir, ni trabajo, ni legalizar su situación pero que no obstante llegan sabedores de que al menos van a tener una manutención asegurada a costa de los españoles, es lógico que las leyes de Extranjería hayan de reformarse e incluso volver a promulgarse con un talante adecuado a la realidad social y con más pragmatismo que “buenismo”. Respetando por supuesto los Derechos Humanos y las garantías constitucionales pero agilizando los procedimientos para que las repatriaciones se realicen de manera automática con el fin de evitar largas permanencias de los extranjeros en los Centros de Internamiento, con el coste que ello supone para una sociedad española donde las familias van a buscar la cena a los contenedores de basura de los supermercados. Largos años hemos sido caritativos, solidarios, generosos e incluso rumbosos, empeñándonos en tratar a quienes llegan ilegalmente como a apátridas y no como a ciudadanos de países soberanos a quienes ha de obligarse a hacerse cargo de sus nacionales, porque las leyes así lo imponen. Y los inmigrantes ilegales tienen nacionalidad de origen por lo que las repatriaciones deberían ser automáticas y en menos de una semana, tomando como ejemplo las políticas de extranjería que se llevan a cabo en otros países. Vamos a “emprender” por lo tanto y con el afán de colaborar a la solución de problemas acuciantes a apuntar algunos extremos y empezaré de forma sencilla, ciñéndome al problema de la inmigración africana en Ceuta, Melilla y el sur de la Península. Una pregunta ¿Puede obligarse a Marruecos a cumplir el tratado de 13 de febrero de 1992 de readmisión de extranjeros de terceros países que accedan a España desde ese país? El tema podría solventarse a nivel Bruselas y también aclarando el coste que pudo tener la firma de aquel Tratado Bilateral de 1992 es decir si se ofreció alguna compensación al país vecino a cambio de las readmisiones y de ser así echar las cuentas porque está visto que no se ha cumplido. ¿Se dan cuenta? Llega la regeneración y vamos a tener ocasión de exigir el que nos exhiban “recibos y comprobantes” porque cuando el Gobierno compensa, ayuda, colabora o coopera no se están gastando su dinero personal, sino gestionando el dinero de los españoles, del sudor de los españoles, como le sale de los cojones. Y eso no puede ser, porque no es correcto, diría más, diría que puede legar a ser “incorrecto”. Máxime cuando en estos momentos tan solo en Ceuta se encuentran setecientos africanos llegados de Marruecos y cada plato de comida que se comen es un plato de comida que se le quita de la boca al hijo de un parado de larga duración español.

Pero se alegan dificultades para las repatriaciones por asuntos de documentación e incluso de que los inmigrantes no colaboran para su identificación, lo que no es ningún problema que un politólogo no pueda solventar porque para quienes se mueven en el mundo de las ideas cada dilema tiene una solución lógica y de lo más normal y evidente, incluso rozando el “A,B,C” de la semiótica. La realidad es que Marruecos no quiere aceptar a los inmigrantes llegados desde su territorio. No hay problema, se revisa el Tratado, se hacen cuentas y se declara derogado.Sin ningún compromiso. Acto seguido nuestro representante del Ministerio de Asuntos Exteriores que piadosamente esperamos que sea un prestigioso miembro de la Carrera Diplomática y que no se siga la dialéctica socialista de “premiar” con un cargo similar al “amigacho o la amigacha” el “fiel vasallo chupapollas” ni al “enchufado” o a la “florero”. Un técnico. Un Diplomático de la Escuela y con cinco idiomas como mínimo. Continúo con el afán “emprendedor”. Llega nuestro distinguido representante de Exteriores a un país como Mauritania: necesitado y poco amigo de las tonterías. Y se realiza con ellos un Tratado Bilateral por el que Mauritania acepta automáticamente en sus aeropuertos a todos los nacionales de países del continente de África que hayan entrado ilegalmente en España. A cambio de este Tratado se compensa a Mauritania con ayudas para el desarrollo dentro de la llamada “cooperación internacional” que consiste en quitarle el dinero a los pobres de los países ricos para dárselo a los ricos de los países pobres. Pero si se desarrollan o no es su problema y en su conciencia queda. Además en otro punto del Tratado se determina que una vez desembarcados los extranjeros, Mauritania se compromete a facilitarles de inmediato un vuelo a sus países de origen utilizando para tal fin la partida económica específica que para repatriaciones les habilite el Gobierno de España. Es decir, que España, desde Mauritania, paga los pasajes hasta los países de origen compensando al tiempo con cantidades determinadas al Gobierno Mauritano por los trámites para la repatriación de cada africano.

Lógico que todo el africano que se encuentre en el aeropuerto de la capital mauritana con el pasaje pagado para su país de origen y vista la realidad poco atractiva del lugar al que ha llegado, opte por aprovechar la oferta que se les brinda y regresar gratis a sus países. Pero no solo eso sino que, tomando el ejemplo del hindú Yunus llamado “el banquero de los pobres” que ha sacado de la miseria a miles de hindúes con el sistema de microcrédito por el que se hacía un préstamo a una familia de diez o veinte euros para que comenzaran comprando la harina y la levadura, cociendo el pan y vendiéndolo a los vecinos, tomando ese ejemplo se le entregaría a cada africano o africana y lo mismo a los menores, un microcrédito de doscientos euros para que lleven dinero al regreso a sus ciudades.

¿Alguna dificultad? Se ayuda a Mauritania y como digo Mauritania digo Guinea, Somalia o Senegal y ellos a cambio de la ayuda colaboran y cooperan en las repatriaciones, que siguen suponiendo un gasto de dinero que les estamos quitando de la boca a nuestros abuelos jubilados con pensiones de trescientos euros, pero que supone menos gasto que mantener a cientos de extranjeros a fuerza de “la ayuda y la subvención”. Porque, sencillamente, no podemos.

¿Han comprobado la sencillez de este planteamiento “emprendedor”? Y como este docenas se les ocurren a quienes bregan por el proceloso mundo de las ideas, porque las ideas y los pensamientos están vivos y son los más cualificados “emprendedores” que puedan encontrarse en el Universo, de ahí que el hecho de que el PP les incentive, acucie y apoye es algo tan inteligente que parece dimanante de la Mente Universal. Y esa sí que es la Madre de todos los Emprendedores.
 

“El tiempo está loco”

Nuria de Madariaga
opinion@elpueblodeceuta.com
 

Estamos en otoño y “algo” se siente, sobre todo por los vientos que vienen trayendo al pasaje de los barcos mareado y harto, nada que no se pudiera evitar con buena voluntad y ya que en Ceuta somos inferiores al gibraltareño Caruana y carecemos de huevos para darle un apretón a Industria, liarnos a tirar bloques por San Amaro, hacernos con hectáreas de mar que nos pertenecen y apañar un aeropuerto como Dios manda y no como el aeropuerto de Leon que ha sido un despiporre de millones y para mí que ni aterrizan los aviones, en fin, “al menos” intervenir la compañía de helicópteros y montar un “puente aéreo” con aparatos aspados cada media hora y a buen precio para que la gente se pueda desplazar sin marearse. Como pueden comprobar el “mantra” de esta serpiente es “nacionalización-intervención”. Y es que aunque mayo del 68 me pilló con trece años y en el Rif algo se me quedó en el caletre. Situación marítima complicada, despliegue de nubes en el Estrecho que Peter Caruana se va comiendo trocito a trocito y haciéndose el despistado en sus afanes expansionistas. De seguir así dentro de poco Gibraltar quedará lindando con la cafetería Charlotte que es donde yo desayuno café y medio panecillo con manteca y miel, mientras Antonio Martín de Evimcesa, Duarte, la hermana de Antonio y otros de su peña juntan dos mesas y montan el contubernio hispano-portugués entre tostadas y periódicos del día. Es lo bueno que tiene mi enclave matinal de desayunos, los periódicos, los tertulianos que andan leyendo muy formalitos y las vistas panorámicas al Estrecho. Temperatura “según se mire” porque parece que ir de verano ya no pega pero tampoco el tiempo pide plumones.Es un otoño atípico y lo encuentro muy variable y muy movido. En Málaga el tiempo es más caluroso pero también más soso y nada de cromatismo de nubes asociados con paletas de pintores impresionistas. Cuando allí se nubla lo mismo cae una gota fría y llega “la riá” ¿Pero y si llega una riá estando en el Charlotte los que desayunamos allí? Pues nos subimos todos al mostrador con Pili y las niñas y nos subimos también los cafés para seguir con lo nuestro mientras llegan las lanchas de Protección Civil a rescatarnos y encima el dueño que es mi vecino no nos cobraría los desayunos para resarcirnos por el disgusto. Pero catástrofes naturales a parte, el comentario común es que “el tiempo está loco” pero para muchos que se quede como está, desapacible pero no helado, cargado de nubes pero no lluvioso y ventosillo pero no con el puerto cerrado y los barcos sin poder salir. Los que sí puede que puedan salir son los helicópteros, pero los vuelos son escasos, los precios prohibitivos y los aparatos angostos y encima cuenta la leyenda urbana que siempre llevan plazas reservadas para “las Autoridades” ¿Y por qué van a llevar plazas reservadas? ¿No existe el Principio de Igualdad en el artículo 14 de la Constitución? Normal si reservaran plaza para un médico o a uno que vaya a hacerse un transplante pero ¿Para una Autoridad? ¿Es que va a una guerra o va a pedirle a Obama que nos mande un Plan Marshall y nos quite un poco el hambre? Nada, irán a cosas de ellos que puede que nos interesen o no. Por ejemplo si van para nacionalizar las navieras y que podamos pagar los barcos al precio del autobús Málaga-Churriana pueden coger la plaza VIP, o si van a intervenir los propios helicópteros para que sean un servicio público que salga cada media hora, que voy que vengo. Desde luego ¡como está el tiempo!