Tras el breve paréntesis
veraniego, retomo mis colaboraciones semanales en este medio
de comunicación con la única intención de ofrecerles a los
lectores una visión personal de diferentes cuestiones de la
actualidad informativa local y nacional. Por todo ello y por
creer ciegamente en el viejo dicho “de bien nacido es ser
agradecido” debo comenzar mi primera colaboración expresando
mi agradecimiento tanto, a la dirección de El Pueblo de
Ceuta como, a cada uno de sus abnegados trabajadores cuya
colaboración es fundamental en la publicación de mis
reflexiones semanales.
En segundo lugar, debo señalar, tal y como manifesté en mi
última colaboración publicada a primeros de julio, que he
aprovechado este intervalo veraniego para reflexionar en
profundidad en relación al argumentario utilizado hasta el
momento, siempre cercano a mis creencias ideológicas y
religiosas. La conclusión extraída de este ejercicio de
meditación, como no podía ser de otra manera, es sencilla
puesto que, como soy católico practicante y militante
convencido del partido popular, todos mis pensamientos
respetaran fundamentalmente los principios básicos derivados
de estas creencias aunque, diferenciando claramente las
ideas mencionadas de las personas vinculadas a las mismas.
Es importante señalar, que han sido muchas las cuestiones de
actualidad publicadas en estos últimos meses aunque, a mi
modesto entender las más importantes de todas ellas tanto a
nivel nacional como local han sido; la decisión del
Presidente del Gobierno de España, José Luís Rodríguez
Zapatero, de adelantar las Elecciones Generales al próximo
domingo día 20 de noviembre como consecuencia de su
incapacidad para devolver a la economía española a la senda
del crecimiento así como, las cuestiones relacionadas con el
primer grupo político de la oposición en la Asamblea,
Caballas.
Debo recodar, que durante meses mis colaboraciones acercaron
a los lectores de este medio la realidad de una coalición
conformada por dos formaciones políticas “fundamentalistas”
tal y como han demostrado en todas las intervenciones
realizadas desde el comienzo de la actual legislatura. Una
labor de oposición caracterizada por la demagogia más
rancia, el enfrentamiento constante con el resto de
formaciones políticas de la ciudad y por la extravagancia en
sus manifestaciones. Una coalición, que entre otras muchas
irresponsabilidades, se ha ausentado de los últimos actos
institucionales celebrados con la única intención de
desestabilizar a la sociedad ceutí amparados en la vieja
estrategia “divide y vencerás”.
En definitiva, una temporada más estaré en la brecha tras
reencontrar una creatividad pérdida, que me permitirá a
partir de estos momentos compartir con todos ustedes mis
modestas reflexiones sobre las diferentes cuestiones de la
actualidad informativa local y nacional desde una visión
personal aunque, en todo momento desde la más absoluta
independencia al estar comprometido única y exclusivamente
con mis principios ideológicos y religiosos. Hoy reemprendo
ilusionado una labor que siempre me ha reportado
satisfacciones personales.
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