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OPINIÓN - MARTES, 13 DE SEPTIEMBRE DE 2011

 
OPINIÓN / EDITORIAL

Las emergencias funcionan

El dramático suceso ocurrido este pasado lunes de madrugada en el Puerto de Ceuta ha dejado constancia de la preparación y la capacidad de respuesta de los servicios de emergencias en la ciudad. Más allá de algunas críticas infundadas, por el calor del momento y por el desconocimiento de los protocolos, lo cierto es que el operativo desplegado en sólo quince minutos movilizó a todos, 061, Cruz Roja, Bomberos, GEAS de la Guardia Civil, otras unidades de la Benemérita, Cuerpo Nacional de Policía, Policía Local y Policía Portuaria. Si hay que lamentar la pérdida de vidas humanas hay que considerar desde el raciocinio que hay circunstancias extremas que se escapan a toda lógica como para que se produzcan accidentes de este nivel.
 

La seguridad va por barrios

El término seguridad lleva implícita una enorme carga de subjetividad, que torcidamente empleada, puede llegar a causar estragos entre los miembros de una sociedad. Más allá de utilizar ciertos términos apelando a la responsabilidad y a la objetividad -todo tiene un por qué-, a veces se emplean expresiones que tienden a la desestibilización social como meta torticera para lograr un objetivo oculto. Es por tanto un malévolo uso de lo tendencioso para causar alarma extraordinaria cuyo trasfondo tiene un fin claro para unos y para otros. La mediocridad, la incapacidad y la insuperabilidad de traumas hacen amigos con facilidad que son capaces de unir voluntades y sinergias de lo torpe para faltar descaradamente a la verdad. Nunca antes ha habido tantos agentes operativos de los distintos cuerpos y fuerzas de seguridad en la calle, esa es la verdad, pero efectivamente la seguridad siempre es subjetiva y va por barrios.
 

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