Rafa Salcedo, pese a reconocer que su equipo no estuvo
acertado en la segunda parte ante el Córdoba ‘B’ (los
cordobesistas tenían un jugador menos), entiende que “el
resultado no es justo porque ellos no fueron mejores y el
gol lo marca Jaime en propia puerta tras un despeje en una
jugada a balón parado. Ha sido nuestra peor segunda parte
porque fue un querer y no poder. Desde el banquillo sentimos
impotencia porque teníamos un jugador más y no creamos
ocasiones ante un Córdoba que como era lógico se metió
atrás”.
El entrenador del Murallas lamenta la lesión de Hakim que
entró en el descanso y tuvo que dejar su sitio a Álex y se
queja de dos penaltis no señalados. “Nos perjudicó mucho la
lesión de Hakim porque en los primeros minutos de la segunda
parte estábamos creando peligro por su banda. Teníamos que
haber tocado el balón porque ellos se dedicaron a defender
el resultado y tratar de salir a la contra. No podemos estar
treinta y cinco minutos colgando balones al área porque no
tenemos jugadores para un juego tan directo. Pecamos de
hacer cada uno la guerra por su cuenta, sentimos impotencia
porque en Córdoba tendríamos que haber ganado o como mínimo
empatado”.
De las jugadas polémicas explica que “el penalti que nos
señalan en contra no existe, pero el árbitro lo pita y
amonesta a Jaime que en los últimos minutos sería expulsado.
En cambio a Jaime en la segunda parte lo agarran dentro del
área y en otra jugada (el central se situó en punta)
controla el balón y cuando va a tirar lo arrollan... Son dos
penaltis que de haberlos señalado nos podrían haber dado la
victoria. Yo no soy un entrenador que venda la moto y
sinceramente no merecimos perder en Córdoba”.
|