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La Feria de Melilla estará abierta para el disfrute de todos
los ciudadanos, tanto locales como foráneos y, de forma
especial, también para las personas con discapacidad, dado
que atendiendo sus recomendaciones, se ha logrado que los
cuatro puntos de entrada sean totalmente accesibles. Además
en la calle de Comisaría se han habilitado aparcamientos
para este colectivo.
Manifestó Francisco Díaz que nos encontramos “en la recta
final” de la organización de los festejos patronales en
honor de la Virgen de la Victoria que se inaugurarán el
sábado, de forma oficial, a partir de las nueve y media de
la noche, para permitir que los melillenses de religión
musulmana que viven el Ramadán, puedan cumplir sin prisas
con la ruptura del ayuno. Por ese mismo motivo las cenas de
los mayores, que se llevarán a cabo el martes y miércoles en
el Hotel Melilla Puerto, retrasarán su horario a las nueve
menos cuarto de la noche.
La Feria 2011 busca que los melillenses y los foráneos vivan
unos días de disfrute y sin preocupaciones, “olvidando un
poco los problemas de la crisis económica”. La intención es
que todos por igual puedan vivir estas fiestas, de ahí que
este año se mantenga el servicio de motocarros para permitir
a las personas con escasa movilidad, poder recorrer el
recinto sin fatigarse. Pero además, dijo que atendiendo a
las recomendaciones del colectivo de personas con
discapacidad, se ha logrado que los cuatro puntos de entrada
al recinto ferial, sean totalmente accesibles. Además la
calle situada junto a la Jefatura Superior de Policía
incluirá un considerable número de aparcamientos para
vehículos de personas con discapacidad.
También dijo que este año se va a potenciar el punto de
información instalado a la entrada, y que además del
programa oficial de fiestas, se facilitará también dípticos
con las actividades que desarrollarán todas las casetas. Ahí
también se podrán adquirir las pulseras de identificación
para niños, las reproducciones en formato A3 tanto del
cartel oficial de feria y del programa de toros y las
entradas para los espectáculos taurinos, que se pusieron
ayer ya a la venta en la propia plaza, en el Bar la Cantina
y el Aragón y en el quiosco de Miguel en la Plaza de España.
El precio de la novillada será de 10 euros, y se regalarán
entradas para esta becerrada a los que compren para la
corrida del día 1, que fija en 40 euros los asientos en
sombra y 30 euros los de sol, y entre 50 y 70 los sitios en
barrera. Continuando con las novedades de esta edición,
anunció Díaz que se han adquirido 17 cambiadores para bebés
que se instalarán en los aseos y en las casetas del recinto,
para facilitar a los padres que puedan cambiar los pañales
con comodidad y sin tener que verse obligados a volver a
casa. También las casetas disfrutarán en esta ocasión del
sistema de microclima con nebulización de agua, con el fin
de bajar la temperatura interior en unos once grados en
comparación al exterior.
A todo esto hay que añadir que en esta edición de los
festejos patronales se han incorporado nuevas atracciones,
desde una montaña rusa, a un juego nuevo denominado tira
chinas, a un simulador de vuelo, sin olvidar el regreso de
la noria y el mantenimiento de los “cacharritos” para los
pequeños y las atracciones tradicionales. Francisco Díaz
calificó de “polémica ficticia” las críticas de PPL sobre
que no se les haya concedido una caseta en el recinto
ferial.
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