Melilla lleva varios días sin registrar ninguna entrada de
inmigrantes. El viernes fue la última vez que un grupo de
‘sin papeles’ consiguió acceder a nuestra ciudad. Desde
entonces, la presión migratoria parece haber descendido al
transcurrir el fin de semana y el lunes sin intentos de
entrada, aunque ello no se traduce en un mayor alivio del
CETI, cuyo censo oficial cifraba la ocupación en 650
personas. Por lo tanto, sigue acogiendo a un número de
inmigrantes bastante superior a su capacidad máxima de 480
personas, lo que supone una saturación por encima del 35 por
ciento.
Desde que el pasado viernes consiguieron entrar a Melilla
once subsaharianos a bordo de una zodiac a motor, nuestra
ciudad parece haber disminuido la presión migratoria que
lleva soportando desde que empezó el buen tiempo. Sin
embargo, el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI)
mantiene dicha presión porque sigue albergando a más
personas de la capacidad máxima para la que fue construida
esta infraestructura.
Según informaron fuentes de la Delegación del Gobierno, el
censo oficial del CETI se situaba ayer en 650 inmigrantes,
una cifra que está incluso por encima de la facilitada el
pasado viernes pese a que desde entonces no se ha producido
ninguna entrada nueva. La explicación a este desajuste es,
según la institución gubernamental, que el CETI y la
Jefatura Superior de Policía no habían coordinado sus
respectivos informes en los últimos días, de modo que había
inmigrantes acogidos en el centro que no habían pasado por
las dependencias policiales para tramitar el correspondiente
certificado de expulsión del territorio nacional,
habitualmente madres con hijos pequeños, que tardan algo más
en pasar por la Jefatura Superior.
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