La visita del Papa Benedicto XVI está cada vez más próxima y
por tal motivo comienzan a ultimarse todos los detalles para
acudir a la XXVI Jornada Mundial de la Juventud. Un total de
30 jóvenes ceutíes serán los que finalmente se sumen al
grupo del Obispado de Cádiz y Ceuta para acudir a este
encuentro. El primer grupo, integrado por once jóvenes
ceutíes partirá mañana desde la ciudad para colaborar en
Cádiz en la recepción de los numerosos peregrinos
extranjeros que también acudirán a Madrid.
El próximo día 16 de agosto dará comienzo la XXVI Jornada
Mundial de la Juventud para recibir al Papa Benedicto XVI
que tiene prevista su llegada a la capital de España el día
18. La organización espera la visita de más de 2 millones de
peregrinos llegados de todo el planeta y donde también habrá
que destacar la presencia de una treintena de jóvenes
ceutíes.
El padre Andrés Muñoz, vicario parroquial de Santa María de
África, resaltaba ayer a EL PUEBLO que finalmente serán
treinta jóvenes de Ceuta los que acudan a esta cita con el
Papa, en su mayoría los mismos que formaron parte de los
voluntarios que recibieron a la Cruz del Papa y el Icono de
María cuando llegaron a Ceuta.
El padre Andrés adelantó que un primer grupo integrado por
once jóvenes partirá mañana por la mañana hacia Cádiz para
unirse allí al equipo de voluntarios que recibirán y
atenderán a los cientos de peregrinos venidos desde el
extranjero (Guatemala, Venezuela, Rusia y Canadá) y que
formarán parte de la expedición del Obispado de Cádiz y
Ceuta que acuda a Madrid. El segundo de los grupos,
integrado por el resto de jóvenes ceutíes que representarán
a la ciudad en la próxima Jornada Mundial de la Juventud,
partirá desde Ceuta el día 15 por la mañana. Estos jóvenes
se desplazarán hasta Cádiz para desde allí iniciar, por la
noche, el viaje hasta Madrid. El padre Andrés Muñoz
resaltaba la “tremenda ilusión” existente en el seno del
grupo ceutí por “poder vivir esta experiencia tan
enriquecedora”. Finalmente, el vicario parroquial de Santa
María de África afirmaba que los dos grandes objetivos que
se persiguen con el JMJ es que “los jóvenes puedan tener una
experiencia de Cristo y así avanzar en la fe”, además de
“encontrarse con la universalidad de la Iglesia”, resaltando
que “el ser cristiano es formar parte de una gran familia”
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