El cuerpo de Bomberos sofocó ayer el incendio de cuatro
coches en las inmediaciones del centro de salud de la
barriada del Príncipe Felipe. Sobre las 11.00 horas, los
Servicios de Extinción de Incendios y Salvamento recibieron
el aviso. Se trataba de una nueva quema de coches
abandonados, una práctica que se ha vuelto casi diaria,
sobre todo, en las barriadas más cercanas a la frontera.
El Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento (SEIS)
recibió en la mañana de ayer el aviso de un incendio en la
barriada Príncipe Felipe. El fuego se inició, en las
inmediaciones del centro de atención primaria del Tarajal,
sobre las 11.00 horas. Las llamas comenzaron en un coche
abandonado y posteriormente se extendieron a otros tres
vehículos que se encontraban aparcados junto a él.
Se trata de una quema más de coches abandonados, una
práctica que se ha vuelto habitual en la ciudad, sobre todo
en las barriadas más cercanas a la frontera. Y es que, los
bomberos reciben casi a diario un aviso de coche ardiendo.
Algunos días, el SEIS ha llegado a realizar hasta tres
intervenciones para sofocar fuegos provocados en coches que
se encuentran en las calles de la ciudad.
A los habituales incendios de coches abandonados que se
vienen sufriendo, en la época estival se les ha unido la
quema de rastrojos. La mayoría de las intervenciones que
realizan los servicios de extinción ceutíes están dedicados
a sofocar estos tipos de fuegos, provocados de forma
intencionada en la mayoría de las ocasiones.
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