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La magistrada del Juzgado de lo Penal número 1 dictó ayer
sentencia condenatoria contra un hombre que reconoció ser el
autor del delito de robo con violencia e intimidación y la
falta de amenazas que le imputaba la Fiscalía, por los que
deberá hacer frente a un año y nueve meses de prisión y una
multa de treinta euros.
Entró en una obra, se encaró con el vigilante de seguridad y
este le quitó la navaja con la que le apuntaba. El
representante del ministerio Fiscal en la ciudad sentó ayer
en el banquillo de los acusados a un hombre por el delito de
robo con violencia e intimidación y la falta de amenazas que
él mismo reconoció ante la magistrada del Juzgado de lo
Penal número uno.
Por tales hechos, el imputado tendrá que hacer frente a la
pena de un año y nueve meses de prisión, por el delito, y
una sanción económica de 30 euros, por la falta, ante la
conformidad alcanzada.
Todo ello porque accedió a una obra que estaba realizando la
empresa ‘Hormigones Hoarce’, a la que intentó robar y en la
escapada se encaró con el vigilante de seguridad de la
misma, al que atacó a punta de navaja y al que amenazó con
regresar una vez que este le hizo desprenderse del arma
blanca, en la carretera del Serrallo, concretamente, en
Cabrerizas Altas.
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juicio
