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Los trabajos de restauración de las Murallas Meriníes
finalizarán en “dos meses”. El arquitecto Pedro Gurriarán,
de la empresa ‘Yamur’, ha explicado que las labores se están
centrando en las torres 12 y 13 y en el lienzo que las une.
Además, se está incorporando nuevo tapial -el material con
el que se hacían “muchas” de las fortificaciones en la Edad
Media- a las zonas que estaban más dañadas.
Los trabajos de restauración de las Murallas Meriníes
finalizarán en “dos meses”. Así lo informó el arquitecto de
la empresa encargada de llevar a cabo los trabajos, ‘Yamur’,
Pedro Gurriarán, quien explicó que en estos momentos se está
restaurando “un lienzo de muralla que hay entre las torres
12 y 13 además de las propias torres”.
A estas labores se suman las de “restaurar el material con
el que está hecha la fortificación, el tapial; se están
restaurando todos y se han desmontado algunas de las que
están en peor estado para incorporar un nuevo tapial que
proteja toda la superficie exterior”. Y es que este material
“es característico de muchas de las fortificaciones de la
Edad Media”. Gurriarán explica que entre las
“especialidades” de ‘Yamur’ se incluye el manejo de estas
técnicas constructivas ya que se ha intervenido en “obras
similares” como las Muralla de Ronda, la Alcazaba de Málaga,
la de Almería, etc.
La intervención que es “más delicada” es en la torre 12, ya
que “presenta problemas de estabilidad porque el terreno no
es muy estable”. Por ello, “se están colocando micropilotes
de 20 metros de profundidad lo que evitaría que si hubiera
un movimiento de tierra, la torre no se caería”. Los
trabajos comenzaron hace dos meses y “se está acelerando
mucho con la obra”. El presupuesto que invierte el
Ministerio de Cultura en estas actuaciones de las Murallas
Meriníes asciende a 480.000 euros y en estos momentos
trabajan “desde especialistas hasta arqueólogos”, concluyó
el arquitecto. Entre cinco y seis personas trabajan a diario
para finalizar con las actuaciones y restaurar este bien
patrimonial.
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