Dicen que la mujer del César no
basta con que sea honrada, sino que además tiene que
parecerlo. O sea como los políticos que además de serlo
tienen que parecerlo, No me refiero a la honradez, sino a lo
de político. Y es que hay algunos que por más favor que le
quiera usted hacer, para llamarle político, no encuentra la
palabra adecuada, quizás porque esa palabra, ante tantos
inútiles como aparecen en el mundo de la política, no
existe.
A veces, cuando no tengo nada mejor que hacer, me da por
mirar las listas electorales, esas a las que hemos votado
unos y otros no, metamos todas las listas en un saco, aunque
las estudiemos por separados, y me entran unas ganas enormes
de liarme a carcajadas, leyendo ciertos nombres que figuran
en ellas.
Leyendo esos nombres usted se pregunta, pero de verdad qué
estos personajes son los que se presentan a las elecciones,
en algunas listas de los partidos, para formar parte de los
componentes de mandas de la Ciudad Autónoma de Ceuta.
Hay días, cuando tengo ganas de pasar un rato agradable, me
coloco todas las listas encima de la mesa, y repaso uno por
uno los nombres de ellos, estudiando a cada uno de los
personajes que van apareciendo en esas listas y, puedo
asegurar que, en mi vida me he reído tanto, haciendo las
valoraciones y la capacidad intelectual de cada uno de ellos
para representarnos al resto de los mortales de esta tierra
nuestra. Y encima quieren que les llamemos políticos. Manda…
la cosa.
Todos ellos, esos que quieren que les llamemos políticos,
los que me hacen reír cuando los he visto en algunas de las
distintas listas de los diferentes partidos, cuando se les
plantea un problema además de fácil solución para cualquiera
con un mínimo de conocimientos, para ellos supone un gran
problema para el que necesitan tiempo para darle la solución
oportuna. Por supuesto previa consulta con el funcionario de
turno. Vamos como decía la sabia de mí abuela de aquel
chiste “en su vida la han visto mas gorda”
Y usted, como yo y como tantos otros ceutíes, viendo esos
nombres que duda cabe que se hacen la misma pregunta, ¿y qué
éste personaje sea el que me represente a mi en la Ciudad
Autónoma de Ceuta?.
Pues, si señor, ese personaje será el que nos represente a
los ceutíes. Y lógicamente, todos nos hacemos la misma
pregunta, pero a ese quién le ha dicho qué es político e
inmediatamente se contesta, pero si no tiene ni la más
p…idea. Y sigue diciendo para usted, quién habrá siso el
inteligente que le ha puesto en la lista. Ya no voto más.
Hombre, las cosas como son, hay que votar porque es un deber
que tenemos todos para después poder realizar las críticas
que creamos más convenientes. Para eso hemos emitido
nuestros votos.
Pero la aparición de estos inútiles, en algunas de la
listas, no es lo que más me preocupa, porque siempre pasará.
Lo que, realmente, me preocupa, son aquellos políticos que
de cara a la galería hacen creernos que se “odian a muerte”
cuando, en realidad, son lobos de la misma camada. Oiga,
como las meigas, haberlos haylos.
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