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Recién llegado de la playa, a
donde hemos ido para pescar sobre las rocas que forman el
espigón construido para evitar el desgaste de arenas que
provocan las olas, me pongo inmediatamente en manos del
médico para que diagnostique si tendrá secuelas el coscorrón
que me he dado en toda la parte posterior del cuerpo.
Me explico: mientras trataba de desenredar el sedal, que se
enganchó en el pico sumergido de una roca, una ola, del
tamaño de un camión TIR, surgió de improviso delante de mí
con tanta fuerza que me arrastró por la escalera,
configurada por las rocas, hacia el mar.
Tanto mis piernas, mi culo, mis riñones y mi espalda
sufrieron azotes mientras caía hacía abajo. Menos mal que
mantuve la cabeza lo más levantada posible, así evité golpes
que podían poner en peligro mis células grises.
Tal vez éste incidente divierta a algunos pero, la verdad,
no es para bromas.
En fin, que la cosa no pasó a mayores y el médico me recetó
linimento, nada más.
Aquí estoy. Dándole al teclado y leyendo, a la vez, la
prensa digital en una de las tres pantallas que dispongo en
mi equipo informático.
No me extraña la explosión del perpetuo Muanmar Gadafi, sí
señores el dictador libio, llamando a sus ‘hermanos’
musulmanes para que comiencen a luchar para la reconquista
de “sus tierras”.
Quiere, el dictador, ‘recuperar’ Andalucía, Canarias,
Sicilia y otras islas del Mediterráneo “porque son árabes y
deben ser liberadas”
Menos mal que no indica si Ceuta y Melilla están incluidas.
Se supone cree que son marroquíes y de ahí que no necesite
nombrarlas. Tal vez ignora la existencia de estas dos
ciudades españolas en el norte de África. Tan alto está
situado en el Olimpo de los fanáticos.
Este tío es de esos del “ojo por ojo y diente por diente”
aunque matice con eso de “les daremos la oportunidad de
entrar en razón”… ni el PP lo mejora.
Como no venga Gadafi a Andalucía y/o Canarias en plan
inmigrante clandestino (con millones en el talego, eso sí),
se apunte al PPA o a Coalición Canaria y se presente a
alcalde de cualquier población, esto para empezar, no veo
cómo quiere quedarse con esos territorios.
Ciertamente soy muy insistente y aunque me odien, empezando
con intimidaciones, sigo declarando que el Islam es,
actualmente, excluyente, expansivo, impositivo e
intolerante.
Todo lo contrario de nuestra cultural judeo-cristiana que
respeta a la persona y no le impone sumisión alguna en
materia de religión. Ni en otras materias.
En fin, que tendremos que soportar a un lunático más con
sueños de grandeza, mientras machaca a su propio pueblo.
Bueno, dejemos de lado esta locura y veamos lo que
acostumbra a emitir cierta cadena dedicada a recopilar
basura a troche y moche.
No escribiré nada sobre eso, sobre lo de la telebasura,
porque está ahí a la vista de todo el mundo y que cada cual
se saque sus propias conclusiones. Pero… ¿quién dirige, de
cara al público, esa telebasura? Es un punto más a mi favor,
al verter críticas sobre cierto colectivo, de la degradación
social a la que llegan determinados personajes con notorio
afán de protagonismo callejero.
El armario quedó atrás y eso impulsa a ser más audaces, en
un dudoso anhelo de ser notorios, en una sociedad donde la
‘caca’ tiene más valor que la vida misma.
Mientras tanto, cierto ex torero sigue sin decir ‘mú’.
Si fuera yo el que me hubiera empachado de vino, u otras
bebidas ‘espirituales’, marcando un 0,86 en control
alcohólico y encima arrollando a un pobre padre de familia…
estaría esposado a la cama del hospital mientras me
‘reparan’ el cuerpo… como no he sido torero, ni me he casado
con una joya nacional así estaría.
En fin, la vida sigue. Yo también.
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OPINIÓN / LAS NOTAS DEL QUIM
