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Imbroda (PP), ha asegurado que Melilla tiene futuro, siempre
que se destierre cualquier concepto de división basada en
planteamientos étnicos o religiosos, un riesgo que se vería
agravado por “la endémica e injusta apetencia anexionista
del vecino país”. Así lo ha aseverado durante su discurso de
investidura que ha tenido lugar hoy, tras recibir de manos
de la vicepresidenta primera de la Asamblea, Cristina Rivas,
el toisón de oro y el bastón de mando de la Ciudad Autónoma.
Para garantizar el futuro de Melilla, llama a todos los que
tienen responsabilidades públicas para llevar a la ciudad
por la senda del progreso.
Así lo ha aseverado durante su discurso de investidura que
ha tenido lugar ayer, tras recibir de manos de la
vicepresidenta primera de la Asamblea, Cristina Rivas, el
toisón de oro y el bastón de mando de la Ciudad Autónoma.
Para garantizar el futuro de Melilla como ciudad española y
europea, “moderna libre y de progreso”, ha hecho un
llamamiento a todos los que tienen responsabilidades
públicas para llevar a la ciudad por la senda del progreso y
les ha invitado a ejercitar el valor del “patriotismo”.
En opinión de Imbroda, ello implica “compromiso, generosidad
y responsabilidad”.
“Pertenecemos a una vieja nación, España, que en su riqueza
plural, aquí en esta esquina, se engrandece con las
distintas comunidades que la poblamos, de orígenes bereber,
europeo, sefardí o hindú”, ha resaltado.
El mandatario autonómico ha dicho considerarse presidente de
todos los melillenses, independientemente de su condición
social, política y religiosa, por lo que ha señalado que su
trabajo irá encaminado a mejorar la vida de todos sin
distinción.
Durante su discurso, en el que ha hecho un balance de la
política que ha venido realizando su Gobierno en los últimos
años, Imbroda se ha referido también a los cambios que se
están produciendo en Marruecos y ha expresado su deseo de
que “esa evolución democrática sea sin retorno” para que se
alcance el estatus de un verdadero estado de Derecho.
El presidente melillense se ha referido también a la
situación de crisis económica que vive España, en la que el
desempleo es uno de los principales problemas y que, de
forma particular, afecta a la ciudad.
Por ello, ha reclamado la conjugación de distintas
voluntades políticas, máxime teniendo en cuenta el
incremento poblacional que se ha producido y que puede
provocar que la situación sea “insoportable”, de forma que
no existan fondos de asistencia social suficientes para
paliar “el grave drama del paro”.
Ha confiado en que se produzca un cambio de signo en el
Gobierno central, con la llegada del PP, que abriría un
“horizonte esperanzador” para la ciudad.
Imbroda ha apuntado que otras medidas necesarias son las
derivadas de las especificidades de la ciudad cara al
reparto de los fondos europeos, y ha confiado en que la
nueva estrategia de cohesión que se abra a partir de 2013
sea beneficiosa. El presidente melillense ha reclamado
también, “por motivos fácilmente comprensibles”, una mayor
presencia de la Fuerzas Armadas con la recuperación de la II
Bandera de la Legión, desaparecida “erróneamente”, y el
refuerzo de otras unidades, lo que elevaría la presencia en
unos 1.000 militares más.
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ejecutivo
