En cierta ocasión fui invitado a
una boda celebrada en una conocida sociedad ceutí, y más de
cien de los invitados se intoxicaron con alguna comida que
debería estar en mal estado. A ninguno de ellos, se les
ocurrió pedir responsabilidades a nadie, pues vete a saber
las cusas que llevaron a esa intoxicación.
99 menores acogidos en “La Esperanza” y “Punta Blanca”, han
sufrido una intoxicación alimentaria. Las causas que han
provocado esta intoxicación están aún por determinar.
Desde el PSOE, la secretaria de política Autonómica, María
del Carmen Ruiz, solicita que de manera inmediata se tomen
medidas, ya que las condiciones en las que está viviendo
estos niños son de hacinamiento, además los trabajadores
hacen su labor en unas condiciones totalmente deficitarias y
no hay suficiente organización para dar cobertura a las
necesidades de todos los menores.
Reconocemos que el asunto de los menores y las condiciones
en las que están, según sus palabras, deben mejorarse. Por
los menores hay que dar todo lo necesarios. Pero también hay
que tener en cuenta, que alguna responsabilidad tendrá el
Gobierno de la Nación sobre este asunto, en el que la Ciudad
Autónoma de Ceuta, invierte varios millones de euros en el
cuidado de esos niños que, mire lo que son las cosas, salen
del bolsillo de todos los ceutíes.
Me parece perfecto que la oposición se lance con toda su
artillería contra el partido del gobierno. Pero, del mismo
modo, me parece un poco exagerado, que por esta causa se
condene al equipo de gobierno y a los responsables de éste
área cuya intervención, para tratar de solucionar el
problema, ha sido de forma rápida.
El otro grupo de la oposición, Caballas, exige una repuesta
política, así como “el cierre inmediato” de los centros,
Vale, cerramos los centros y dónde los metemos. Porque la
oposición esta para criticar al gobierno pero, del mismo
modo, para aportar soluciones. Criticar es lo más fácil del
mundo, pero para criticar lo que está mal hecho, hay que
tener la solución de que nosotros lo haríamos mejor.
Y todo éste desgaste y despliegue de la oposición contra el
equipo de gobierno por una intoxicación de las que
habitualmente se dan en verano y que con toda posibilidad,
se va a cortar en nada de tiempo.
Siempre he mantenido que, por el bien de los niños, el mejor
entorno que deben de tener es el familiar, para que estando
en sus casas con su familia, no exista el desarraigo
familiar, cultural, tradiciones y formas de vivir. Cosa que
no encontrarán en un país extranjero, con unas costumbres,
cultura y tradiciones diferentes a la suya.
Además, en esa comparecencia pública que ha solicitado
Caballas, de la consejera de Juventud, Deportes y Menores,
seguro que la Coalición, teniendo en cuenta los millones de
euros que le cuestan estos niños a la Ciudad Autónoma de
Ceuta, de acuerdo con sus ocho medidas, del plan de
austeridad que han presentado, cuya cuarta medida dice que
se supriman todas las subvenciones cuya única finalidad
reside en comprar de voluntades políticas, va a pedir que se
suprima esta subvención a ambos centros de acogidas. Pues
puede ocurrir que estos niños, llegado su momento, como
estómagos agradecidos, voten al PP que, con estas
subvenciones a ambos centros, ha comprado sus voluntades
políticas. ¿O no?
|