Los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea han
respaldado este viernes en la cumbre celebrada en Bruselas
facilitar la reintroducción temporal de controles
fronterizos dentro del territorio comunitario en caso de
flujos masivos de inmigrantes. Los Veintisiete aceptan así
las exigencias formuladas por Italia y, sobre todo, Francia,
tras la crisis por la llegada de inmigrantes de Túnez a raíz
de la revuelta ciudadana en el país norteafricano. “Se
establecerá un mecanismo de salvaguarda para hacer frente a
circunstancias excepcionales que pusieran en peligro el
funcionamiento general de la cooperación de Schengen (el
espacio sin fronteras.
riores), sin menoscabar el principio de libre circulación de
las personas”, ha anunciado el presidente del Consejo
Europeo, Herman Van Rompuy, al término de la cumbre.
“En última instancia, y dentro de ese mecanismo de
salvaguarda, se autorizará el restablecimiento excepcional
de los controles fronterizos internos, en una situación
auténticamente grave en la que un Estado miembro ya no
estuviera en condiciones de controlar su parte de frontera
exterior. Esta medida se tomaría con arreglo a unos
criterios objetivos y a una evaluación común, con un alcance
y por un plazo estrictamente limitados, y teniendo en cuenta
la necesidad de poder reaccionar en casos urgentes”, ha
indicado Van Rompuy.
Pese al acuerdo para reintroducir las fronteras interiores,
el presidente permanente del Consejo Europeo ha asegurado
que “todos los jefes de Estado y de Gobierno están
profundamente comprometidos con el libre movimiento de
personas. Es un logro cardinal de la integración europea y
un derecho fundamental de los ciudadanos”.
Sarkozy ha celebrado que los “principios” de esta reforma
acordada “corresponden punto por punto a lo que Francia
había pedido” tras la crisis de los inmigrantes tunecinos.
El presidente francés ha explicado que corresponderá a la
Comisión examinar si se dan circunstancias excepcionales que
justifiquen la reintroducción de las fronteras, pero ha
dejado claro que la decisión final estará en manos de los
Estados miembros.
análisis es comunitario y la decisión de restablecer los
controles en las fronteras es nacional”, ha dicho el
presidente francés. “Si Schengen no se reforma, existe el
riesgo de que desaparezca”, ha avisado.
|