PortadaCorreoForoChatMultimediaServiciosBuscarCeuta



PORTADA DE HOY

Actualidad
Política
Sucesos
Economia
Sociedad
Cultura
Melilla

Opinión
Archivo
Especiales

 

 

sociedad - JUEVES, 23 DE JUNIO DE 2011


El edificio fue demolido. archivo.

reclamacion
 

El juez dictamina que la Iglesia poseía el local que vendió el vicario

Tras su venta en 2007 a una inmobiliaria, la
familia Ferrer reclama la propiedad del bajo que administraron 30 años
 

CEUTA
Virginia Saura

ceuta
@elpueblodeceuta.com

En 2007 la inmobiliaria Bentata compró una propiedad sin llaves ni escritura. Se la había vendido el vicario quien defendía que el local pertenecía a la Iglesia. Sin embargo, también reclabama esta titularidad Antonio Luis Ferrer. Pero la falta de documentos ha llevado esta disputa a los juzgados. Ahora, un juez ha dictaminado que los Ferrer no obstentan la titularidad, que por tanto es de Bentata.

El pasado 11 de mayo, el Juzgado de Instrucción Número 2 acogió el juicio en el que la inmobiliaria Bentata solicitaba la propiedad del local que había comprado en 2007 al vicario, Francisco Correro Tocón. Un bajo que adquirió sin llaves ni escritura y sobre el que también reclama la titularidad Antonio Luis Ferrer, quien durante los últimos años ha defendido en diversos pleitos que este inmueble ha pertenecido a su familia. Sin embargo, el juez no lo ha entendido de esta manera y así lo ha reflejado en su sentencia.

El fallo declara que Ferrer no tiene el dominio del local situado en el Paseo de las Palmeras y por tanto “no procede la cancelación o anulación de los asientos registrales que contradicen su posesión”. Una sentencia que Ferrer ya ha decidido recurrir ante la Audiencia Provincial. El máximo órgano judicial de la ciudad tendrá que decidir quien es el verdadero propietario de este local.

Mientras, Ferrer espera que la balanza se decante en su favor ya que defiende que esta propiedad ha estado en manos de su familia desde 1976, cuando su padre la adquirió. Su abogado, Manuel Marfil, está convencido de que finalmente se reconocerá esta titularidad ya que la familia ha ejercido una titularidad “pública, pacífica e ininterrumpida durante 30 años”, tal y como defendió en el juicio. Un hecho que ha desestimado el juez de instrucción alegando que en 1976 el entonces dueño, Ibáñez Trujillo y el padre de Ferrer “convinieron la compraventa de una cosa existente y simplemente acordaron que en tanto no se concluyeran ‘las operaciones pendientes’ el vendedor se reservaría el dominio”, por lo que el magistrado entiende que la posesión no comenzó en esa fecha ya que el comprador “sabía que no adquiriría la propiedad en tanto no se formalizaran todos los elementos del contrato”.

Sobre este punto tendrá que arrojar luz el máximo órgano de justicia en Ceuta, ante el que Antonio Luis Ferrer recurrirá la sentencia que no le reconoce la propiedad.
 

Imprimir noticia 

Volver
 

 

Portada | Mapa del web | Redacción | Publicidad | Contacto