Había pensado, bien pensado por
cierto, que a estas alturas de mi vida nada me iba a
asombrar. Estaba en un error, hay cosas que me siguen
asombrando, sobre todo las prerrogativas que se toman
algunos personajes, sin tener base para ello, porque cómo
decía la sabia de mí abuela,”nadie le ha dado vela en éste
entierro.
Caballas califica la firma del convenio del Campus como un
“espectáculo”, y propone otras medidas la creación de una
residencia “tutelada” por la Ciudad de Granada. Y como no
podía ser de otra forma, la suprema inteligencia política de
esta tierra, sacó a colación lo que se gasta la ciudad en un
equipo de fútbol. Las obsesiones traen malas consecuencias
para el asunto del buen funcionamiento del cerebro y él
tiene dos enormes obsesiones, los “mercenarios” y la AD
Ceuta.
Por lo visto todos los problemas que tenemos en esta tierra
son los llamados “mercenarios” y la AD Ceuta. Y, al parecer,
en estos dos importantísimos puntos van a basar su oposición
en la Asamblea Caballas. El paro y otras cosillas son
auténticas menudencias, al lado de esos dos enormes
problemas que no nos deja avanzar. De película.
Espectacular va a ser la oposición que va a ejercer la
Coalición, llevando a la Asamblea, en cuantos plenos se
celebren, como asuntos de vital importancia para el
desarrollo de nuestra tierra, el asunto de los “mercenarios”
y la AD. Ceuta.
La máxima aspiración de la Coalición es ser “la voz de la
ciudadanía en el Pleno de la Asamblea de Ceuta”. Para ello,
la máxima inteligencia política de esta tierra dijo:”Buscar
una sociedad más justa donde la igualdad de oportunidades
sea efectiva…”. Acaba de descubrir la sopa de ajos. Quién no
quiere una sociedad mas justa.
La sociedad sería más justa, si en verdad entrasen a formar
parte del gobierno de la Ciudad Autónoma, todos aquellos a
los que la ciudadanía le han dado sus votos para
gobernarnos. Pero votos efectivos no regalos de otros
partidos, porque el nuestro, aquel que se creó ni los
seguidores nos han votado.
Para tomarse la prerrogativa de tener poder para gobernar,
debemos de contar con los votos suficientes que nos hayan
dado los votantes. Uso votantes que nos han dicho tantas
veces que no nos quieren ver ni en pintura, dentro del
gobierno de las Ciudad Autónoma, que nuestra presencia, ante
esa constante negativa, si que supone todo un espectáculo.
Espectáculo que, sin duda alguna, tendrá su fin porque no
tiene razón de ser y mucho menos, que a quien el pueblo no
quiere que le represente, se levante como abanderado del
mismo. Hasta como chiste es una jartá de malo.
Y desde luego, por mucho que lo intente, utilizando como
armas la demagogia, jamás podrá ser la “voz del pueblo”. Si
acaso de una parte de ese pueblo, parte minoritaria, porque
de lo que no hay duda alguna es que el pueblo ha dado su
confianza, una vez más, haciéndole sacar mayoría absoluta,
al Partido Popular.
Pensándolo bien, no se por qué me asombro de que quien nada
puede aportar, porque el pueblo no lo quiere, se crea en el
derecho de darnos lecciones. ¿Lecciones de qué?.
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