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El pasado día 15 se celebraba la onomástica de Santa María
Micaela y por tal motivo la comunidad educativa del colegio
conocido por como las Adoratrices, organizó ayer su
tradicional procesión con la imagen de la Santa desde la
Iglesia de San Juan de Dios hasta las instalaciones del
centro, contando con la presencia de decenas de ceutíes.
Para conmemorar la onomástica de Santa María Micaela, la
Asociación de Madres y Padres del Colegio Concertado Santa
María Micaela organizó una serie de actos que dieron
comienzo a las 19.00 horas en la Iglesia de San Juan de
Dios.
Decenas de jóvenes, así como un gran número de padres y
madres se acercaron hasta la iglesia para que el padre
Francisco Jesús Fernández Alcedo oficiara, junto al padre
Miguel Tenorio, una emotiva Eucaristía en honor a esta Santa
que este año también conmemora los 202 años desde su
nacimiento.
Una vez finalizada la Eucaristía, donde todos los alumnos
tuvieron una participación especial dió comienzo una
procesión con la imagen de Santa María Micaela, la cual fue
llevada a hombros por los niños y niñas del citado colegio y
que han asistido a la II Escuela de Costaleros que el AMPA
de este centro ha venido desarrollando y que quedó
clausurada el pasado jueves por la tarde. Además un amplio
cortejo donde no faltaba de nada, cruz parroquial, banderas
de las Adoratrices, jóvenes mantillas, incluso las filas de
los alumnos más pequeños que iban agarrados fuertemente de
las manos para no perder la fila.
Debido al hermanamiento y a la vinculación existente entre
el Colegio Concertado Santa María Micaela y la Hermandad de
Nuestro Padre Jesús Caído y Nuestra Señora de la Amargura,
una amplia representación de esta última también formó parte
del cortejo, procesionando con su mayor insignia, el
‘bacalao’ escoltado por vara, además de también colaborar
con la agrupación musical de esta Hermandad.
Los más mayores del centro fueron los encargados de portar
la imagen de la Santa, con seriedad y devoción durante todo
el itinerario el cual comenzó en la Parroquia de San Juan de
Dios y desde allí se dirigieron hasta el Colegio Santa María
Micaela en la bariada del Sardinero.
Finalmente, una vez en el centro docente, siguieron con una
pequeña fiesta para celebrar tan emotiva fecha.
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