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Cuando la temporada 2010/2011 da sus últimos coletazos con
la participación del Real Murcia (ya ascendido) y del
Sevilla Atlético en la eliminatoria de ascenso a Segunda
División, la AD Ceuta sigue preparando la próxima campaña
mientras que se mira de reojo un año del que no se quieren
repetir los errores. Errores que han sido, finalmente, los
que han impedido al cuadro ceutí estar actualmente luchando
por una plaza en la categoría de plata del fútbol nacional.
Consciente de ello, Joseba Arriaga reconoce que “la
temporada no ha sido la que nosotros esperábamos”. El
delantero del conjunto caballa admite que “nadie se esperaba
que el Ceuta fuese a quedarse fuera del play off”, y lamenta
“los últimos seis meses”, que “no han sido buenos y que nos
han penalizado mucho”, siendo consciente de que “tenemos que
aprender de los errores de este año para no cometerlos la
próxima temporada”.
La 2010/2011 no ha sido, sin embargo, únicamente mala para
el Ceuta. El propio jugador vasco, que ha pasado más de
medio curso resuperándose de la rotura del segundo dedo de
su pie derecho, reconoce que “mi año ha sido nefasto”.
Arriaga, que ha estado siete meses y medio sin poder jugar
al complicarse de forma continuada su lesión, lamenta que
“cuando regresé tampoco pude tener continuidad debido a una
serie de molestias, y cuando mejor me encontraba se ha
terminado la temporada”. De este modo, el delantero se
consuela “trabajando” incluso habiendo finalizado la
campaña, ya que, como él mismo afirma, “lo único que me
queda es hacer deporte y seguir entrenando para llegar lo
mejor posible a la pretemporada y coger el grupo a tope y
con ganas”.
Recordando lo que se ha dejado atrás este curso, Joseba
Arriaga confía en que cambien las cosas desde julio para
“compensar lo que este año no se ha podido conseguir”.
Consciente de que “el Ceuta apostó muy fuerte por mí, y yo
también aposté por este equipo, al que llegúe con muchísima
ilusión”, el delantero vasco admite que “este era un
proyecto hecho para dos años; el primero no ha podido ser
pero el año que viene tendremos que dar el do de pecho para
pelear por la primera posición y sobre todo luchar por el
play off y el ascenso a Segunda División, que nos hemos dado
cuenta de que es factible y que lo hemos dejado escapar
nosotros”.
Si en algo coinciden todos los jugadores del equipo es que
reconocen unánimemente en que lo que ha imposibilitado la
consecución del objetivo han sido “principalmente errores
nuestros, de la plantilla y del cuerpo técnico que no hemos
sido capaces de ganar los partidos. Obviamente han sido
muchas cosas las que han podido influir, pero cada persona
es un mundo y para el próximo año van a llegar nuevos
refuerzos y tendremos que estar arriba desde el inicio”.
Joseba Arriaga tampoco olvida que “el equipo ha tenido que
superar muchos hándicaps, porque hemos tenido dos o tres
lesiones de larga duración además de muchas otras de uno o
dos meses que han mermado mucho la capacidad del equipo y
que le ha impedido poder entrenar con normalidad durante la
temporada”, sin dejar atrás el “tema expulsiones”, que este
año “ha sido este año muy duro”, porque “en toda mi carrera
había vivido esto; 25 expulsiones no se puede permitir en un
equipo que aspire a estar arriba. Un equipo así tiene que
atacar, jugar al fútbol y evitar expulsiones que sobre todo
no sean debido al propio juego, y será algo en lo que
tendremos que mejorar para el próximo año”.
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“Espero que llegue un buen técnico que nos haga conseguir el
objetivo”
Durante el periodo de compensación
entre el cierre de la temporada y el inicio de la próxima
pretemporada, a Joseba Arriaga sólo le preocupa el “estar en
plena forma” para que “cuando llegue el nuevo entrenador con
su cuerpo técnico me encuentre en las mejores condiciones
posibles”. En cuanto al propio técnico, del que “todavía no
sabemos nada”, el delantero vasco es consciente de que
“llegará con su cuerpo técnico y con un plan de trabajo
concreto, y todos querremos llegar en las mejores
condiciones a ese momento”. Consciente de que “se oyen
muchos nombres”, Joseba Arriaga espera que “llegue un buen
entrenador que seguro que vendrá con mucha iluisón y que nos
haga conseguir el objetivo y permita al equipo estar donde
se merece estar”. Arriaga, que junto a parte de la plantilla
continúa en Ceuta, se marchará mañana viernes al igual que
los últimos integrantes de la plantilla para continuar con
sus vacaciones en sus respectivos lugares de origen antes
del inicio de la próxima pretemporada.
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FÚTBOL / SEGUNDA DIVISIÓN ‘B’
