Sobre las 20.00 horas de ayer, la calle Jaúdenes se
convertía en el escenario de un atropello. Un peatón, que
cruzaba la vía por un lugar sin paso de cebra, según
explicaban testigos de los hechos, fue alcanzado por un
vehículo que no pudo evitar colisionar con él. La víctima
cayó al suelo tras el golpe rompiéndose la nariz debido al
impacto. Rápidamente, la dueña de una de las tiendas
adyacentes llamó al servicio de urgencias y sacó el botiquín
para atender al herido. Una de las personas que pasaba por
allí le asistió en la misma calzada, en la que le taponó la
nariz al peatón, que no perdió la consciencia en ningún
momento.
El dueño del vehículo, un Polo azul marino, también se
dispusó a atender al hombre que le había salido al paso en
la calzada. Una de las vecinas que pasaba en el momento del
suceso describió los hechos, “como de película” ya que tras
el impacto el hombre “salió volando” por encima del vehículo
y cayó en la calzada. Afortunadamente, la vícitma, que fue
trasladado en ambulancia, no presentaba ninguna herida de
gravedad, exceptuando la lesión nasal.
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