No es la primera vez, ni será la
última que escriba sobre este asunto del despilfarro
económico que se comete en España, con subvenciones y más
subvenciones y los privilegios que tienen quienes fueron y
ya no son nada dentro del mundo de la política.
Acabar con todas estas subvenciones y privilegios nos
llevaría a acabar con la crisis que tenemos, debido al
ahorro de millones de euros que se iba a conseguir.
Siempre he escrito que el que quiera partido político que lo
pague, tal y como se hace en los EE. UU con cenas y actos
donde las aportaciones de los que acuden a estos actos,
sirven para pagar la campaña de los distintos partidos
políticos.
No es de recibo que del dinero de todos los españoles, cada
partido político que participa en unas elecciones,
dependiendo de los diputados que saquen se lleve una buena
cantidad de euros. Esto debería ser como cualquier sociedad,
el que quiera pertenecer a ella que pague su cuota.
Pasa igual que con esas subvenciones entregada a las ONG.
Está de una claridad meridiana que el que quiera hacer
caridad que se rasque su bolsillo.
Queda como muy mono hacer caridad y aparecer como los buenos
del asunto, con el dinero del resto de los españoles porque,
en la mayoría de los caso, ninguno de esos tan caritativos
pone un euro de su bolsillo. ¡Son tan buenos!.
Y el que dice de partidos, dice de todo los demás, el que
quiera pertenecer a algo, que pertenezca como afiliado al
mismo pagando la cuota correspondiente que será de la que se
sustente el asunto del que es afiliado. No mantener nada,
con el dinero de todos los españoles, algunos de los cuales
ni siquiera les interesa lo más mínimo pertenecer a ninguno
de los asunto.
Estoy totalmente de acuerdo con los concejales de UPyD, en
el Ayuntamiento de Madrid, a renunciar a los coches
oficiales. Cosa que ha puesto en evidencia al resto de los
partidos que llevan años beneficiándose de ellos.
Y lo que cada vez entiendo menos es que, por haber tenido un
cargo como ministro o presidente de cualquier Autonomía, se
sigan beneficiándose de coches oficiales, oficinas,
secretarías y guardaespaldas. Todo ello, por supuesto,
pagado con el dinero de todos los españoles.
Estos señores cuando terminen su trabajo que se busquen las
habichuelas, como cada trabajador e hijo de vecina que, en
la mayoría de las ocasiones, les queda una pensión de
auténtica pena, teniendo que pagar sus impuestos, de los
cuales sale el dinero para pagar todos estos privilegios de
personas que han sido, pero que ya no son nada. El que
quiera, coches oficiales, oficina, secretarias y
guardaespaldas que los pague de su bolsillo.
A los únicos que les daría una paga de por vida, creo que la
tienen, sería a aquellas personas que han sido presidente
del Gobierno, Las cosas claras porque tienen todo el derecho
del mundo a vivir con desahogo, sin tener que preocuparse de
si podrá llegar a fin de mes.
Además les pondría una oficina, secretaria, coche oficial y
guardaespaldas.
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