Guillermo Molina afronta este fin de semana con el Ferla Pro
Recco el reto de conquistar la Euroliga de clubes que se
disputa en Roma. El equipo genovés, que consiguió el título
el año pasado tras superar en semifinales al Partizán por
8-7 y en la final a los montenegrinos del Primorac Kotor por
9-3, es el favorito en la ‘final four’ y el rival a batir
por los otros tres protagonistas de la cita europea más
importante por clubes.
El Pro Recco, que tiene una selección mundial permitiéndose
el lujo de que algunos jugadores como Guillermo Molina sólo
disputen la competición europea, llega a Roma después de
haberlo ganado todo en las fases anteriores, pero consciente
de que no puede bajar el pistón si quiere repetir título.
Los genoveses se verán las caras en las semifinales con el
Budva de Montenegro, mientras que la otra semifinal la
disputarán el Partizán de Belgrado y el Havk Mladost Zagreb
de Croacia. La final teórica debería enfrentar el sábado al
Recco y Partizán que ya protagonizaron el año pasado en
Nàpoles una semifinal vibrante que se llevó el equipo del
jugador ceutí por un solo gol. Molina cumple en el Ferla Pro
Recco su segunda temporada después de su brillante paso por
un equipo más modesto como el Brescia en el que deslumbró en
su primera temporada en Italia convirtiéndose en el máximo
goleador del Campeonato. En el Recco no asume tanto
protagonismo porque está rodeado de otros grandes jugadores,
pero Guillermo sabe que en la ‘final four’ de Roma está
predestinado a desempeñar un papel importante.
Palmarés extraordinario
El Pro Recco, club fundado en 1913, ha ganado seis Euroligas,
cuatro Supercopas de Europa, mientras que en Italia suma
veinticuatro títulos de Liga y siete de Copa. Un palmarés
impresionante que lo sitúa en lo más alto del waterpolo
europeo, aunque el Partizán de Belgrado, con la base de la
selección serbia, es un rival muy potente que aspira a
desquitarse de la pasada edición. Roma se viste de gala con
la final a cuatro de la Euroliga.
|