La aparición de la Virgen María en la ciudad portuguesa de
Fátima fue conmemorada un año más por el Colegio ‘La
Inmaculada’. Todos los estudiantes del centro participaron
en una procesión por el patio de una pequeña talla de María.
Los alumnos disfrutaron junto a sus padres que acudieron
también a este acto ya tradicional por estas fechas.
“El 13 de mayo la Virgen María bajó de los cielos a Cova de
Iría...” Así se inicia una de las canciones más
representantivas del día que se conmemoró ayer: la aparición
de la Virgen en la ciudad portuguesa de Fátima a tres
pastorcillos: Lucía, Jacinta y Francisco. Desde ese momento
se contabilizaron otras apariciones que han dado a la zona
fama mundial.
Por ello, cada 13 de mayo millones de cristianos celebran
esta festividad. Algunos de los colegios ceutíes tampoco
olvidan una fecha tan señalada. Así centros como Santa María
Micaela o La Inmaculada realizan diversas actividades para
rendir un homenaje al milagro de Fátima.
‘La Inmaculada’ es uno de los colegios en los que la figura
de la Virgen María cobra mayor significado. Así lo constató
la directora del centro, Carmen Roca, quien explicó que el
colegio que dirige está “dedicado” a María.
De esta manera, todos los ciclos formaron parte durante la
mañana de ayer de una serie de actividades, organizadas por
Infantil. Una procesión por el patio fue arropada por todo
el alumnado del centro así como por numerosos padres que
quisieron formar parte del tributo a María. El centro es uno
de los que siempre registra una mayor asistencia de padres
en las actividades que organiza.
Los alumnos recitaron oraciones, muchas de ellas inventadas
por ellos mismos, así como multitud de canciones propias de
un día tan significativo, “se busca motivar la devoción que
los estudiantes puedan sentir hacia la Virgen”, explicó
Roca.
La imagen que procesionó por el patio fue de pequeñas
dimensiones, una de las razones fundamentales por las que
este acto es organizado por los estudiantes de Infantil, “se
asemeja a ellos y eso hace que se impliquen más”.
Los trajes de sevillanas para las alumnas fue la nota
predominante aunque los pequeños también acompañaron
vestidos de ‘cordobés’.
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