OPINIÓN - LUNES, 9 DE MAYO DE 2011

“En el marco incomparable de El Varadero...”

Nuria de Madariaga
opinion@elpueblodeceuta.com
 

Tal que así comienza toda crónica social que se precie, señalando el lugar de la celebración del evento en términos almibarados y elogiosos para “dar empaque” a la ocasión. Y la comida del PP para interventores y apoderados, ya saben, para quienes están llamados a reventarse con especial empeño durante la jornada electoral del 22 de mayo, amén del “marco incomparable”, podía presumir de “diseño de tarta merengosa incomparable”. ¡Categoría de tarta! con foto de Vivas incluida, eslóganes y tanto adorno que daban ganas de guardarla para ponerla en la vitrina de la salita y hasta daba reparos hincarle el diente, por el disgusto de estropear el diseño.

El almuerzo bien, las viandas abundantes. Antonio López, gerente de Emvicesa, currándose el puesto del más “fashion” de Ceuta en reñida competencia con Guillermo Martínez, con camisa de rayas de cuello blanco, y Luis Marquez Salinas en camisa de cuadros. Mucha tertulia improvisada y para mí que la gente tenía más ganas de reunirse y hablar que de saciarse con las exquisiteces, personalmente no me sacié con nada y ejercí de espectadora ya que donde no estoy invitada no me arrimo por muy apetecibles que resultaran los platos de gloria bendita y de la bendición de Dios que ponían en las mesas.

En fin, el alimento fue visual porque había gente bien vestida y estaban todos excelentemente emperejilados, sobre todos los yogurines de Nuevas Generaciones entre quienes creo que acerté a vislumbrar al bellezón tipo Julio Romero de Torres de Rocío Salcedo, lo que significa que “no” tan solo las rubias con mechas votan al PP. Por más que la señora de Vivas sea rubia, llevara un elegante foulard y fuera muy bien peinada, al igual que Yolanda Bel que sacó a pasear a su flequillo-talismán del PP e iba de camisa rosa compitiendo en estilo con la dama que se sentaba junto a Cristobal Chaves, una de las más “chic” con lo que parecía ser una petite robe noire en negro y con manga corta.

Pues bien, en el “marco incomparable” se dio fe de la locuacidad también incomparable de los del Partido Popular en cuanto tienen ocasión de hacer camarilla y reunirse en plan electo-fraternal, mucho comentario y mucho chascarrillo, mucha puesta en común y el ambiente en general nada chafardero y con los decibelios adecuados, vamos, que no se formó griterío como pasa en las bodas y en las comuniones. Al revés, de cada grupo de invitados podía extraerse un tema interesante de conversación y vista la resistencia dialéctica de apoderados e interventores, no me extraña que ni se inmuten ante la jornada que les espera en sus respectivas mesas, para ellos un paseo militar.

¿Lo mejor? El diseño de la tarta, mis felicitaciones al artista y supongo que su impresionante aspecto correría paralelo a lo delicioso de su sabor. Y si los asistentes iban muy aparentes ya con “look” primaveral lo digo también y si el estilo imperante era de “boda postinera” más que de comida entre compañeros no me duelen prendas en pregonarlo.

Y si añado que hay un compromiso pendiente de invitación colectiva y multitudinaria, con ambiente verbenero para el 23 o el 24 de este mes tampoco miento, porque me lo han adelantado “mis fuentes” que, por cierto nada tienen que ver con las fuentes de ambrosía en forma de embutidos ibéricos de la mesa presidencial, esos no los probé, pero el convite de la Victoria con mayúscula no me lo pierdo ni que me despellejen.

Por supuesto que cuento con que haya una tarta decorada en condiciones, ya saben, con el toque design.
 

El 22 de mayo y la herencia envenenada

Nuria de Madariaga
opinion@elpueblodeceuta.com
 

Enorme jolgorio por la artística y simbólica foto del Presidente Juan Vivas en el Magazine de ‘El Mundo’ de ayer domingo, se ve que “es todo corazón” y corazón está poniendo en los mil y un actos de esta campaña electoral que desembocará el 22 de mayo en una victoria que, el Gobierno de la Nación, ha querido que disfrutemos con un regusto amargo. Es un “regalito” muy especial para el futuro Gobierno de Rajoy, la “herencia envenenada” que han querido dejar como marca identificativa de su desastroso paso por España y se veía venir. Más claro el agua.

Ya desde las páginas de este diario y con motivo del comunicado de ETA anunciando que ponían fin a décadas de chantaje y extorsiones a los empresarios vascos, opinamos sesudamente que eso era “un apaño” y que a cambio, el dinero que los terroristas no iban a sacar de los pobres empresarios, lo chuparían afanosamente de las instituciones con la legalización de Bildu-Batasuna. Eso era una evidencia, porque la manada de gandules, analfabetos, chorizos y delincuentes que conforman ETA y sus grupos afines, lo que no iban a hacer es ponerse en las colas del INEM o irse, ya ni a arrimar cemento, porque la construcción la han arruinado los bancos, sino ni a echar jornales en el campo desriñonándose. En absoluto, esa gentuza no está acostumbrada a trabajar.

Y ya podía decir misa en arameo la Sala del Tribunal Supremo, que luego están los jueces progresistas del Tribunal Constitucional para enmendar la plana y hacer una jugada que sentará a los herederos etarras en los escaños y les asignará jugosos sueldos y subvenciones mamados del sudor de la España que madruga. Y sin control del Tribunal de Cuentas. La Policía se sube por las paredes y el Partido Popular encaja como puede este feroz retroceso de la lucha antiterrorista y la broma de mal gusto que supone la última jugada de Zapatero : legalizar al batasunerío para que el Gobierno de Rajoy y sus muchachos tengan que reventarse hasta volverlo a ilegalizar y a expulsar de las instituciones.

No hay problema. Se hará. Pero que no vengan los socialistas en plan “mesiánico” respondiendo a las duras críticas del PP con la acusación de que “no respetan las decisiones judiciales”. Y yo les digo que por supuesto que no. Se respeta lo que es justo y se rechaza lo que es injusto. Ya lo diga un juez o un mariscal de campo.

Y en lo relativo al “respeto” añado que, por nuestros principios y nuestros valores, entendemos que, el respeto “se merece” pero no “se impone”, porque la imposición es represiva y coercitiva y jamás se puede obligar a sentir algo hacia alguien o hacia una institución. Como mucho te pueden obligar a que guardes silencio por miedo, a que no expreses tu rechazo por temor a las represalias, a que no te manifiestes por el riesgo de ser castigado. Te pueden obligar a callarte con las tripas retorcidas, pero nunca a que respetes a alguien que tu no consideres que “lo merece”. Si no hay mérito, admiración y reconocimiento no existe el respeto. ¿Respeto a las decisiones judiciales? Cuando lo merezcan, ni antes ni después. Como mucho te las tienes que “tragar”, si las consideras injustas, infundadas o incongruentes, porque no hay más remedio y de lo contrario recibes represalias.

Y llegará un momento en que regeneremos el nauseabundo “Lourdes linguístico” al que nos han tratado de condenar el pensamiento único y la corrección política imperantes en este país aborregado y temeroso. Eso vendrá lógicamente con la regeneración democrática y la reconstrucción de nuestros descostillados valores. Entonces... ¡Sorpréndanse! ¡Maravíllense!. Podremos gozar por vez primera en la Historia de la Iberia Vieja, de auténticas libertades de opinión y de expresión. Y nuestros representantes políticos abominaran de la “palabrería buenista” y escupirán de sus bocas las frases hechas tipo “respeto pero no comparto...” que es lo que se dice con la boca pequeña y el culillo apretado cuando alguien ha hecho alguna barrabasada y no se puede protestar, ni reclamar, ni expresar libremente el furor. ¿Y por qué no se puede protestar, ni reclamar, ni expresar libremente el furor? Pues porque ustedes saben y yo sé que eso de “el Estado de las libertades” es una patraña, una entelequia y un puro mamoneo dialéctico, vamos que es más mentira que decir que el CIS apunta al triunfo como eurodiputado de Kiko Rivera Paquirrín el hijo de la Pantoja y que van a designar como jefe de protocolo de la Zarzuela a Juanito el Golosina

¿Y por qué no voy a poder decir con libertad y desde mi libertad que, ni comparto, ni respeto, ni trago la sentencia del Tribunal Constitucional legalizando a Bildu-Batasuna?. ¿Es que los magistrados son infalibles y hablan en el Nombre de Dios?. Pues no, ni están libres de error ni hablan en nombre de nadie y menos en nombre del pueblo español porque que yo sepa jamás les hemos votado, si acaso les nombra el Gobierno votado en su día por el pueblo pero que, ante su derrumbe en las encuestas y el rechazo popular absoluto, ya no puede considerarse moralmente legitimado para decidir, nombrar, apañar o trapisondear más que en nombre de sus propios y viles intereses particulares.

¡Ay, regeneración, que faltita haces! El 22 de mayo la primera “corná” y luego a tratar de dar la vuelta al ruedo con una explosión de pañuelos blancos en los tendidos. Pero nos queda enfrentarnos a un morlaco “esquináo” de nombre Trajinoso, más malo que el pecado y con más malas artes que la bruja Lola cuando se lía a encender velas negras y con los instintos de un gato puesto a calentar en el microondas. ¿Y que se le puede echar a esa faena? Pues la doble “C” de corazón y cojones. De ahí el simbolismo que adquiere la presencia en papel del Presidente Vivas en el Magazine presumiendo de corazón y dejando intuir claramente la segunda “c” porque es hombre prudente y de acrisolada discreción y no le gusta alardear de manera “cantosa” de lo que en el PP tenemos para dar, regalar y montar un outlet con los excedentes.

Nuestros valores nos hacen afrontar el camino hacia nuestros fines y objetivos, no como una “ruta dolorosa”, sino como un desafío apasionante digno de ser vivido cada milímetro y a eso le echamos las dos “C” cojones y corazón.

De ahí el simbolismo y el mensaje espiritual dimanante de la foto de Vivas en el Magazine. OK Presidente, mensaje recibido.