El presidente de Melilla, Juan José Imbroda (PP), ha
confiado ayer en que la visita privada que está realizando
el Rey Juan Carlos a Marruecos sirva para evitar que este
verano se vuelva a repetir la crisis fronteriza que tuvo
lugar en agosto del año pasado entre los dos países en la
ciudad autónoma.
“Es lo que yo quiera y lo que desearía, que esa frontera
funcione siempre perfectamente y que no haya ningún corte”,
ha respondido Imbroda a preguntas de los periodistas sobre
la visita privada de Don Juan Carlos a Mohamed VI.
Imbroda ha insistido en la importancia que tiene que la
circulación por la frontera sea “cada día más fluida” en
ambos sentidos, dadas las intensas relaciones comerciales y
sociales que existen a ambos lados de la alambrada.
En su opinión, esa frontera “debe servir para unir, no para
desunir”, por lo que ha confiado en que esta visita del Rey
“sirva para ello”.
Asimismo, ha reiterado su rechazo “total” a que este verano,
cuando más intensa es la circulación fronteriza, se produzca
cualquier corte en el tránsito que pueda afectar a Melilla y
los melillenses, así como que se repitan “las agresiones
verbales y acosos” que recibieron las mujeres del Cuerpo
Nacional de Policía destinadas en la frontera.
Imbroda ha recordado que el PP “se quedó solo protestando
públicamente” por este conflicto el pasado verano, mientras
que el PSOE y Coalición por Melilla (CPM), partidos de la
oposición, “estuvieron muy calladitos”.
“No deseo para nada que ocurran estos incidentes, al revés;
y si ocurrieran, los criticaré fuertemente”, ha concluido.
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