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OPINIÓN - MARTES, 3 DE MAYO DE 2011

 
OPINIÓN / ANÁLISIS

El enorme compromiso de Mariano Rajoy


Nuria de Madariaga
opinion@elpueblodeceuta.com

 

Rajoy es un hombre bueno. Bello no es, para que vamos a engañarnos, pero sí es bello aquello que representa que es el latir colectivo de millones de españoles representados por esos diez puntos de diferencia con el PSOE.

Llega a Ceuta el próximo inquilino de la Moncloa. Y esta será y creo no equivocarme, una de las metas más emotivas de su particular “Tour de España” de cara al triunfo del próximo día 22, si “la cosa” va como Dios manda y si tomamos en cuenta los principios de la física cuántica. Ya saben, todos somos “energía, transformación e inteligencia”, y el hecho empíricamente constatado de que Dios manda en todo lo bueno y lo bello del Universo, el Partido Popular ganará por goleada.

Mariano Rajoy es un hombre bueno. Bello no es, para que vamos a engañarnos. Pero sí es bello aquello que representa que es el latir colectivo de millones de españoles representados por esos diez puntos de diferencia en las encuestas con el PSOE. Dicen las Sagradas Escrituras que “los hijos de las tinieblas son más listos que los hijos de la luz”, será porque Lucifer no toma los domingos como día de asueto, de puro perverso y diabólico y por tal de llevar la contraria al Creador; a eso siempre he respondido que serán más inteligentes pero que los hijos de la luz ven mejor el camino por la claridad.

No obstante, en esta España triste que a veces nos hiela el corazón, los de “las tinieblas” son oscuros y malos, pero en absoluto inteligentes, como mucho trapaceros, Sytel viene Sytel va, “te montamos una Ballena Blanca, hacemos pasar a cuarenta criaturas por un calvario y luego salen cinco condenados y no hay consecuencias porque está todo controlado”. “¿A que tramamos otra Malaya con vulneración de normas de reparto y tal?. ¿A que es para cagarse?. Y sin consecuencias, ¿qué fiscal nos va a echar cojones?” No. Nunca se les han echado los cojones, hasta ahora.

Pero luego llegan las luces alógenas, se empieza a esclarecer el tema, se tira del hilo y se desenmaraña el ovillo del estado policial, por mor de que se ve mejor, pasamos el 22 y la moción de censura para exigir adelanto electoral por falta de legitimidad ante el abrumador fracaso de las encuestas. Y ellos dicen que ni hablar. Que van a conseguir “la paz” y lo de que “ETA abandone las armas”. Claro, será a cambio de sentar a los batasunos de Bildu en las instituciones, ponerles a jornal, pagarles la Seguridad Social y dejarles manejar las subvenciones, como cuando reinaba el PNV y entonces, lo que no trincan con la extorsión a los empresarios lo enganchan sentando a los suyos en los ayuntamientos. ¡Miren que listos son!.

Hasta a un párvulo de cuatro años se le hubiera ocurrido algo menos evidente e infinitamente menos burdo. Porque hasta para maquinar y tratar de engañar a los españoles son previsibles, al menos para nosotros, los hijos de la luz, que les enchufamos los focos y les vemos venir a kilómetros.

Con “ese fregáo” va a encontrarse Mariano Rajoy. Si no se adelantan las generales tendremos tiempo de cortarle las alas a los faisanes y de enterarnos de los enjuagues que se traen con eso de que ya no van a seguir extorsionando a los empresarios.

Pero el problemilla de Rubalcaba es que los franceses no van a tragar con componendas, los etarras han matado en Francia y Sarkozy es mucho Sarkozy y va a por ellos. Y el mandatario galo no es de los que manda construir prisiones especiales de cinco estrellas para los asesinos, como la que “esta gente” ha construido en Álava porque el centro penitenciario de Nanclares de Oca y demás no presentan los requisitos de calidad y de confort que demandan los clientes etarras. En Ceuta, en Almería y en tantos lugares las futuras cárceles son un aparatoso proyecto, mientras personas que no tienen las manos manchadas de sangre viven como las bestias. Porque no hay dinero. Los dineros son para construir hoteles penitenciarios para quienes chapotean en la sangre de sus víctimas.

Mariano Rajoy y todos con él, codo a codo, vamos a tratar de “desfacer los entuertos”, a meterle potencia a los alógenos y a dar mucha luz, a ver con lo que nos encontramos. Duro compromiso el de este hombre cabal que es como Dios manda. Duro compromiso devolverle a España la honra y el honor, la dignidad y la decencia. Y hasta la justicia. ¿Regenerar? No. Más bien va a ser reconstruir porque se nos ha quedado España como Dresde tras los bombardeos aliados y hay que recomenzar desde los cimientos, retirando los escombros, apuntalando lo que sea salvable y levantando entre todos una nueva Transición en la que ya nunca jamás tengan un lugar las tinieblas, por pura contaminación lumínica, no podrán reinar.
 

El “pinchazo” de CCOO


Nuria de Madariaga
opinion@elpueblodeceuta.com

 

Aróstegui no alcanza el más mínimo predicamento. CCOO ha pinchado en Ceuta, es un globo sin oxígeno, fláccido e inconsistente, le hace falta como el comer el que le enchufen una bombona y abran la espita, gente joven y con ímpetu.

Es evidente e irrebatible, mientras que los ugetistas van dando lecciones de buen estilo sindical, CCOO convoca una manifestación para el 1 de mayo que presumían iba a constituir un “antes y un después” de la historia de las movilizaciones sindicales en Ceuta y lograron reunir a poco más de un centenar de allegados bajo el originalísimo lema de “todos contra el paro” o algún tipo de evidencia similar.

Lo cierto es que la enconada defensa verbal realizada por su Secretario General de los parados de Ceuta de quienes trata de ejercer “de alguna manera” de portavoz y valedor, no alcanza el más mínimo predicamento. Los desempleados están informados y conocen perfectamente la cifra de cinco millones de parados en España, más de un millón y medio en Andalucía, saben que los bancos no conceden créditos a las empresas, que la falta de dinero arruina a las Pymes y descostilla al sistema productivo y que no se trata de que los Gobiernos de tal o cual autonomía enjareten “planes de empleo” pura precariedad, sino de cambiar el modelo económico con la convocatoria de unas elecciones generales que echen a los calamitosos socialistas del poder y traigan nuevos aires y nuevas ideas.

Y eso es lo que se necesita de manera imperiosa en el sindicato Comisiones Obreras de Ceuta: oxígeno. Sus estructuras aparecen artríticas y anquilosadas, aquejadas de todos los achaques de la vejez, el sempiterno y repetitivo discurso quejoso de Juan Luis Aróstegui ya no cala en nadie, por anticuado y por añejo. El Gobierno de la Nación puede cambiar y va a cambiar, pero desafortunadamente para el auténtico sindicalismo, la política de Matusalén de CCOO de Ceuta seguirá inamovible, estancada en su izquierdismo obsoleto y tremendamente tediosa y aburrida en su desvinculación del nuevo idioma de la modernidad.

Eso sucede cuando se eterniza un viejo izquierdista émulo del camarada Fidel: que pasa de moda pero continúa inamovible, cerrando el paso de manera absolutamente férrea a cualquiera que llegue con innovaciones, discursos diferentes, ansias renovadas e ideas distintas. CCOO cada día asemeja más al “cortijo de Aróstegui” y no se prevé una solución de recambio. Pero debe haberla porque tienen que existir sindicalistas más jóvenes y más innovadores, capaces de hacer que el cortijo particular del Secretario General y su camarilla, dejen de plantar habas y para sacarle mayor rendimiento se monte una cooperativa y se dediquen al turismo lugar de lugares con encanto.

Pero “todo” no puede permanecer “siempre” fosilizado, inerte, momificado, con la vieja dialéctica, los viejos modismos, los viejos extremos comunes, los viejos rencores y los viejos agravios.

Comisiones ha vuelto a pinchar. Por mucho que organizaran en su momento algarabías (rectifico, voy a retirar lo de “algarabía” porque se trata de la denominación del bello lenguaje arábigo andalusí que se utilizaba en la Granada de Boabdil) rectifico y digo “follones” urbanos de parados utilizados para dar la nota reivindicativa y exigir empleo en Ceuta. Para nada. El Gobierno se multiplicó por veintitrés para paliar carencias y escaseces, para llegar allá donde no llegaba el Gobierno de la Nación, remediando situaciones, aportando ingenio adonde no llegaban los medios y tratando desesperadamente de no desasistir a nadie, de gestionar impecablemente para todos.

Ahí es donde tendría que haber estado CCOO, no en plan follonero, sino colaborando, dialogando, apoyando, informando y ofreciéndose al Gobierno por si necesitaban al sindicato para aportar y no para crispar. Pero los parados de Ceuta saben perfectamente que ni CCOO va a influir en los bancos para que otorguen líneas de créditos, ni va a influir en los empresarios para que sigan aguantando o para que se lancen, ni va a influir en los mercados, ni CCOO es capaz de crear un solo puesto de trabajo ajeno al de “liberar” a los afortunados sindicalistas que buenamente pueda. Quedará algún “estómago agradecido” pero son los menos, los más andan angustiados con el sistema crediticio y las políticas económicas. Y todo ello se fragua en mentes modernas, que están al día, que manejan datos y estadísticas.

La Transición ya pasó y es un romántico recuerdo, las luchas obreras son de otro siglo, el cacareado “riesgo de fractura social” viene de la mano de los tiburones de la banca cuando despojan de sus viviendas a los españoles por impago de la hipoteca y les dejan en la calle y con la obligación de seguir pagando intereses, porque lo de “casa por hipoteca” en vigor en tantos países no rige aún aquí y no hay un sindicato con pelotas que lance a España a la calle para reclamar justicia y protección ante la avaricia bancaria.

CCOO ha pinchado en Ceuta, es un globo sin oxígeno, fláccido e inconsistente, le hace falta como el comer el que le enchufen una bombona y abran la espita. Gente joven y con ímpetu, con ideas, con redaños, que sean realistas y estén en la realidad. Y si no es así se encontrarán con desagradables sorpresas, de hecho puede que un día, al abrir la puerta de su sede sindical, se encuentren con una réplica de las cuevas de Nerja y con sus Secretario General, Secretario de tal y de cual, fosilizados y convertidos en estalactitas y estalagmitas. Eso sí, los supervivientes podrían recapitalizarse organizando “visitas guiadas” y en Ceuta tendríamos otro paisaje natural.
 

La asignatura pendiente de la ciudad de Ceuta


Nuria de Madariaga
opinion@elpueblodeceuta.com

 

En los malos tiempos el sacrificio y el esfuerzo han de ser colectivos y que las CCOO cierren el pico y “liberen” a unos cuantos más, pero que no se entrometan en el motor económico de la sociedad, ni se acerquen a nuestras Pymes

Observo estupefacta como los tipos de CCOO de Ceuta se aferran a sus ideas obsoletas con las que tratan de frenar el desarrollo de la economía local en base a sus lacrimosos discursos pseudomarxistas. Y me estoy refiriendo a una flexibilización de los horarios del comercio que ya sigue media España de manera más o menos solapada pero respondiendo a necesidades reales. No podemos obviar que el gran pulmón de nuestra economía, tras la explosión de la burbuja inmobiliaria y la destrucción de millones de puestos de trabajo por cortesía de la Banca, nuestro motor, es el turismo.

Puedo poner ejemplos que conozco de ciudades que han tenido que adaptarse a la demanda de los visitantes que, cuando llegan a un lugar, ya no demandan la trilogía ‘sol-playa-paella’, eso queda para un sector, porque otro cada vez con mayor implantación demanda ‘cultura-compras-consumo’ y se lanza a “vivir y pasear” las ciudades disfrutando de los monumentos, visitando los museos y antes que nada y lo he visto y lo he presenciado, realizando innumerables compras hasta el punto de que, en pleno mes de agosto, muchos comercios de las grandes y menos grandes ciudades, tienen montados los escaparates de la temporada otoño-invierno y los visitantes se van pertrechados de ropa a buenos precios, mucho menos cara que en sus países de origen, se equipan en España y encuentran aquí mejor moda, buena calidad, tendencias, accesorios y sobre todo diseños en zapatería donde, pese a la competencia desleal de los ultracutres zapatos chinos, seguimos teniendo un Mascaró, un Camper, unas Prettys ballerinas (las llevan en Hollywood) y las líneas de calzado de los grandes como Adolfo Dominguez, Purificación García, Bimba y Lola y no olvidemos Hakei ni los diseños internacionalmente reputados de Castañer y no sigo contando porque se me ponen los dientes largos si recuerdo la “línea abolengosa” de Inditex, aún no llegada a Ceuta y que arrasa en Madrid, Barcelona y Marbella que es el exquisito Uterqüe.

Y conforme nuestras marcas alcanzan proyección internacional, el turismo aprovecha para adquirir productos de primera en nuestro país. De ahí la necesidad de ofertar “ciudades vivas” lógicamente no al estilo de Taiwan donde abren veinticuatro horas sobre veinticuatro, pero sí con una flexibilidad absoluta propia de una sociedad libre, que no constreñida por intereses mezquinos. ¿Y que sabe CCOO de Ceuta en general y Alonso en particular de las demandas del sector turístico cuando jamás ha superado la dialéctica ‘castrista-mierdosa’ de ‘los pobres y los ricos, el obrero y el capitalista’?. Eso que se lo cuente a los grandes tours operators de cruceros cuando lleguen tres fines de semanas consecutivos al puerto de Ceuta, se encuentren la ciudad con todo cerrado a cal y canto y no vuelvan más porque es un muermo.

Existen intereses y más en época de crisis y con cinco millones de criaturas quitándose el hambre mojando el pan en el aceite, que superan con mucho los intereses ruines de unos sindicatos que realmente hoy por hoy tan sólo sirven para generar a “sindicalistas liberados” y potenciar la economía de los “estómagos agradecidos”. El que un empresario o un comerciante abra o cierre su negocio no debería jamás entrar en las rígidas normas que tratan de imponer cuatro mentecatos. ¿Quién regula por ejemplo los horarios de las tiendas de los chinos?. Esos hacen lo que les da la gana para empezar y todo lo necesario para ganar dinero y hacer prosperar su negocio para terminar, sin son veinticuatro horas las son.

Y estos sindicalistas de tres al cuarto, de atender con integridad a los intereses del pueblo, deberían ser los primeros en potenciar todos aquellos instrumentos que permitan relanzar la economía, más horas de apertura, incentivos, mayores sueldos, más puestos de trabajo, menos impuestos, la cultura del esfuerzo y del trabajo duro y el comprender que la competencia es sana y es eficaz.

Ceuta siempre dependerá de su comercio y en el futuro de las empresas que acudan como moscas al pastel engolosinadas por los incentivos y las vacaciones fiscales, pero el turismo, como reto pendiente, conlleva un ajuste de todo el entramado comercial de la ciudad, flexibilidad, disponibilidad, ofertas atractivas, animación y ambiente en las calles y hasta ‘noches-blancas’ de los museos y los monumentos con ‘abierto-total’, iluminación, conciertos, mimos actuando y obras de teatro en las esquinas.

En los malos tiempos el sacrificio y el esfuerzo han de ser colectivos y que las CCOO cierren el pico y “liberen” a unos cuantos más, pero que no se entrometan en el motor económico de la sociedad, ni se acerquen a nuestras Pymes ni de refilón, porque, si realmente representaran los intereses de los trabajadores serían los primeros en tocar las palmas ante mayor flexibilidad, más horas de trabajo, incremento por lo tanto de los jornales, generación de empleo aunque sea en forma de suplencias y a más trabajo más ganancia, más consumo, más prosperidad y mejores expectativas de futuro. La pelota está en el tejado de Pymes, pequeños comerciantes, grandes comercios y los sindicatos a callar.
 

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