La mayor preocupación para los vecinos de la barriada de Los
Rosales es la falta de seguridad en su zona. En ella se
producen oleadas de delincuencia que pretenden erradicar,
por lo que exigen una mayor vigilancia, sobre todo en las
horas nocturnas. Una petición que llevan haciendo desde hace
años y que mantienen, ya que a pesar de un incremento de las
patrullas tanto de Policía Local como Nacional en la zona,
todavía siguen sufriendo atracos, robos y vandalismo.
Mientras, el barrio se encuentra en un proceso de
remodelación con el empedrado de sus parterres y la próxima
restauración de sus fachadas.
La seguridad es la mayor preocupación para los vecinos de la
barriada de Los Rosales. Atracos, robos, quema de coches o
pinchazos de ruedas son algunas de las situaciones con las
que tienen que convivir sus habitantes, quienes reclaman una
mayor seguridad para su zona.
No obstante, en los últimos meses se ha notado un mayor
seguimiento de la barriada gracias a la ‘Operación Guadiana’,
en la que colaboran Policía Nacional y Local, para aumentar
la vigilancia de las barriadas, según explica el presidente
de la Asociación de Vecinos de Los Rosales, José Ríos.
“Pasan más patrullas, pero nosotros pedimos una vigilancia
más constante”. Una exigencia que Ríos trasladó al jefe de
Policía Local, José Antonio Sorroche, con el que se reunió
recientemente.
Tras este encuentro, el presidente de la asociación de
vecinos afirma que la seguridad del barrio ha mejorado:
“Tenemos más presencia policial y se han incrementado las
actuaciones de la Unidad de Intervención Rápida (UIR) de la
Policía Local”. “Estamos en una época tranquila, pero esto
va por rachas. A veces hay oleadas de robo de bolsos o de
destrozos en coches”, comenta Ríos. Una situación que desde
la Asociación de Vecinos intentan evitar a toda costa. Por
ello, piden que se aumente la vigilancia “sobre todo a
partir de las ocho de la tarde”, momento en el que la
barriada queda más desatendida según explica Ríos. “A esa
hora llegan los niños de las actividades de la tarde y en
alguna ocasión les han quitado los móviles”, añade.
Otra de las preocupaciones de los vecinos de Los Rosales es
el estado de las arquetas de la empresa de telefonía. “Están
podridas y son un peligro sobre todo para los niños”, alerta
Ríos. Uno de los vecinos ya se hirió al poner un pie sobre
una de ellas, que cedió ante el peso. “Nos hemos quejado a
la empresa responsable y les hemos solicitado que lo
arreglen pero no aún no han hecho nada”, cuenta Ríos.
‘Lavado de cara’
Estas arquetas ofrecen una imagen que contrasta con el nuevo
aspecto del barrio. Hace unos meses la Ciudad inició la
reforma de todos los parterres de Los Rosales, que se están
revistiendo de piedra por tramos. En la plaza principal ya
se han concluido estas mejoras que son el inicio de un
proceso en el que también se restaurarán las fachadas y
cubiertas de los edificios. El inicio de estas obras está
previsto para este año. “En cuanto acaben con la
restauración del barrio de O’Donnell comenzarán en Los
Rosales y esperamos que terminen para 2012”.
Además, desde la asociación de vecinos han promovido la
instalación de barandillas en las aceras de las calles con
más pendiente en el acceso a la plaza o la sede de la
asociación. También se está haciendo un ‘lavado de cara’ a
los muretes que se encuentran en la zona. “Una brigada del
Plan de Empleo se está encargando de pintar todas las tapias
del barrio”, explica Ríos.
Para este año también se pretende incluir a la barriada en
el ‘Plan Aparca’. Con este fin, desde la asociación de
vecinos, han solicitado a la Ciudad la construcción de un
aparcamiento de tres plantas.
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