Dicen que los amigos los cuentas
con los dedos de la mano y te sobran, frase que escucho
todos los dias por los rincones caballas. Dicen que los
amigos, los de la carcel y los de la mili, en los momentos
duros y de fatigas, que como dice mi amigo JUANDE y este es
de los pocos, que “javier en el refugio, a las cuatro de la
mañanga, amigos somos todos” pero ya me dirás para asuntos
de males y hospitales, ja si te vi no me acuerdo.
De un tiempo para acá, cuando leo y releeo algunos artículos
míos de hace solo tres años, si tuviera que repetirlos no
podría, por haber cambiado muchas cosas y el tener que
reinventarse uno mismo, eso de “cambiar el chip” y los
vocablos a emplear, por cuanto los conocidos pueden decir ,
mas pesado que pepe blanco con el cocido madrileño..
Javi mas duro, mas caña, mas feroz , si as acostumbrado al
personal a poesias, a vivencias a sentimientos caballas,
cuando aprietes las clavijas, vendran a recriminarte, a
dejarte de hablar y en el peor de los casos, en plan gentuza
a meterte las manos por la cara...
Cuantas veces he sido paños de lagrimas de familiares,
amigos, parientes y afectos, pero se preguntó alguien quien
había para escucharme ami?
Cuando veo esos equipos de trabajo, grupos literarios, de
artistas, deportivos, políticos y por supuesto por la fecha,
las agrupaciones carnavalescas, siempre me gusta leer HAN
COLABORADO...
Dos grandes personas han llegado a mi vida, y por tanto tan
sencillo que es tomarnos el café con churros, el escucharnos
un rato, por la actualidad, tienes que rodearte de gente
joven, los de los treinta años son lo mejorcito de la
sociedad actual, un poquito menos tambien, los peligrosos
los que entramos en los master mas de cuarenta y a las
pruebas vistas me remito.
IVAN MARQUEZ, el ivancito y JAVIER TORRES, javi spun, mas
buena gente no puedo encontrarme todos los días, no hay mas
terapia de sentirte arropado y con cariño y afecto, si les
doy consejos de los buenos y malos momentos vividos y ellos
sencillamente me dicen JAVI COGE GANAS DE SEGUIR VIVIENDO LA
VIDA.
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