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El consejero de Educación de la Ciudad Autónoma de Melilla,
Antonio Miranda y la superiora de las religiosas de María
Inmaculada, Mercedes Moraleda, firmaron ayer el convenio por
el que la Ciudad concierta, con sesenta mil euros, 20 plazas
para niños de 2 y 3 años de la Escuela Infantil que atienden
estas religiosas en el Monte María Cristina.
Aseguró Antonio Miranda que era “un nuevo motivo de
satisfacción” firmar este convenio con las religiosas de
María Inmaculada por la gran labor social que llevan a cabo
con las familias sin recursos. El objetivo de este acuerdo
es que la Ciudad concierta 20 plazas para niños de 2 y 3
años de la Escuela Infantil que las religiosas atienden en
el Monte María Cristina. La subvención es de 60.000 euros y
el dinero se destina a personal, equipamientos, compra de
material y a otros gastos.
Las religiosas, merced a este acuerdo, se comprometen a
mantener estas 20 plazas a lo largo del curso, además de
ofrecer a los niños servicio de comedor escolar. También se
encargarán de la selección de los alumnos, priorizando los
pertenecientes a familias en riesgo de exclusión. Pero
también anunció el consejero que se ha concedido a las
religiosas una subvención de 4.500 euros para que puedan
continuar con su programa “Educar en la diversidad”, del que
se beneficiarán 40 niños con necesidades socioeducativas de
entre 6 y 11 años, que recibirán clases de refuerzo escolar.
Por su parte la superiora de la congregación, la hermana
Mercedes Moraleda, agradeció a la Consejería su apoyo, dado
que “sin esta ayuda no podríamos seguir con nuestra
guardería porque las familias que atendemos no pagan nada;
de hecho hay niños que sólo vienen porque tienen asegurado
el servicio de comedor”. Por estos motivos a la hora de
seleccionar al alumnado “siempre primamos a los que
pertenecen a núcleos familiares que más lo necesitan”.
Señaló que el dinero que les concede la Consejería “se
estira al máximo” para abarcar más.
En cuanto al programa de apoyo escolar, explicó que hasta
ahora lo venían desarrollando los sábados dentro de un
conjunto de actividades lúdicas, “pero hemos visto que es
necesario que se aumentara la duración del programa tras
detectar las carencias de estos niños”.
Con los 4.500 euros que les da Educación se hará posible que
puedan impartir clases de refuerzo educativo todos los días
de la semana, en horario de tarde, en concreto, de cinco a
siete.
Habrá dos grupos de 20 alumnos cada uno, el primero con
escolares de entre 6 y 8 años, y el segundo de entre 9 y 11
años. Los sábados continuará la programación de actividades
lúdicas y deportivas. “La ayuda no es mucha, pero sí es
suficiente para atender el programa hasta fin de curso”.
Explicó el consejero que con el concierto de plazas y con
las que dispone la Consejería de los centros propios, se
pretende que cuando en abril se abra la oferta de plazas de
escuelas infantiles para el próximo curso, puedan ofrecerse
más de 400 plazas.
A este fin se dirige los convenios firmados con Santa Luisa
de Marillac (concierto de 8 plazas de 2 y 3 años por 24.000
euros), las 8 plazas de Comamel de 1 y 2 años por 24.000
euros, y las 20 plazas de María Inmaculada para niños de 2 y
3 años por 60.000 euros; a las que habrá que sumar las 20
plazas a concertar con Divina Infantita por diez mil euros y
las 12 plazas de Cruz Roja por once mil.
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