OPINIÓN - MARTES, 15 DE MARZO DE 2011

Mohamed Alí y la lealtad hacia los suyos

Por Nuria de Madariaga

Todo parece indicar que, incluso quienes pronosticaban el futuro más agorero al invento de la Coalición Caballas, vamos a tener que reconocer que, en la recta final, puede que primen en Mohamed Alí la razón y la lealtad hacia los suyos y reclame para UDCE los tres primeros puestos en la lista de la Coalición

Su electorado jamás le perdonaría la traición de relegar “a los suyos” para aupar a terceros en discordia (jamás la definición ha sido más adecuada) y además con el hándicap de que, los “terceros” no aportan básicamente nada y no es que nada suman, sino que se ha visto que restan.

Lo que resulta evidente es que la carismática y serena Fatima Hamed es un segundo puesto cantado (como poco) y arrastra a un contingente joven de ambos sexos y a un número destacable de féminas concienciadas. Fatima siempre ha sido transparente, mira de frente y la sinceridad vende. Con respecto a Abdeselam desde este diario expresamos nuestra incredulidad ante el hecho, abiertamente inoportuno, de que Mohamed Alí pudiera renunciar, por puro oportunismo político y por aupar a “otros”, a un tipo como Selimo, auténticamente leal en las vacas gordas y en las vacas flacas, fiel a los postulados de la UDCE y de una proyección pública muy positiva.

No digo nada nuevo cuando comento que, en política, despertar hostilidades y antipatías es una pésima estrategia de marketing, porque espanta al electorado que desea siempre para el futuro una asamblea constructiva, encaminada hacia el mañana, donde la oposición tenga la altura moral de apoyar al Gobierno cuando lo merezca y también criticarle si estiman que ha errado, criticar aportando soluciones factibles y no parlotear como papagayos en plan “todo es lo peor”. La línea de Alí y de sus “dos magníficos” ha estado habitualmente imbuida en un pragmatismo muy racionalista, nada que ver con el lamentable espectáculo folklórico-reivindicativo de los últimos meses, más apropiado para una película de Torrente que para servir en serio a la sociedad.

Fallan por tanto los pronósticos acerca de que el líder de UDCE “traicionaría” a sus votantes renegando de “su” gente, de “sus magníficos”. Las encuestas daban unos resultados calamitosos, de culo, cuesta abajo y sin frenos. Pero, en la recta final ha acontecido un “tomar las riendas” por parte del abogado y tomarlas junto a sus más incondicionales y operativos allegados: Fatima y Selimo. Parece que Alí ha aprovechado, tal vez agónicamente, los minutos de prórroga y formando un triunvirato de futuro, ha parado en la portería cualquier oportunidad de que le metan el gol.