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Antes de las cinco de la tarde llovía, no como lo había
hecho en Algeciras dos horas antes, pero sí con las ganas
suficientes como para que el personal se quedara en casa.
Afortunadamente, el partido era a las seis y tres cuartos de
hora antes ya se había calmado la lluvia.
A pesar de eso, poca clientela se dio cita en Alfonso Murube,
algo que se viene repitiendo, y muy especialmente cuando el
tiempo no acompaña, como pasaba en la tarde del domingo,
aquí en Ceuta.
Un Cádiz ramplón
Antes del comienzo del encuentro, mi amigo Teo Vargas que es
el que más sabe sobre el Cádiz, sin ningún género de dudas,
me decía que no traía demasiada confianza con su Cádiz, en
esta visita a Alfonso Murube.
Y estaba en lo cierto, porque los gaditanos tienen un equipo
veterano, que sabe jugar, pero que está muy limitado y si en
Cádiz, en la primera vuelta, ganaron a duras penas, aquí el
punto que se han llevado fue más por errores del Ceuta que
por méritos propios suyos.
En toda la primera parte, llegaron con cierto peligro a los
dominios de Fock, en la jugada del gol y en otro par de
ocasiones, en una de ellas con paradón del meta ceutí a tiro
de Pachón.
Poco bagaje para un equipo con aspiraciones y que partía con
la idea de no moverse del primero o del segundo lugar de la
clasificación.
Y el Ceuta sin saber sacar provecho a esto
Ante un equipo como el Cádiz que visitó Alfonso Murube el
domingo, el Ceuta tiene que saber sacar rendimiento y buscar
los puntos, desde el primer instante.
Hasta el minuto 13 de juego no se acercó el Ceuta a la meta
de Álvaro Campos. Y he dicho acercarse, no haber creado
verdadero peligro. Otros 13 minutos pasaron hasta que volvió
a llegar, 25 minutos y medio, ocasión que se le presentó en
un rebote.
Muy poco más hubo, en todo este primer tiempo, en el que el
centro del campo era una laguna en la que se perdía todo el
mundo sin salir jugando la pelota, en condiciones.
Mejor en la segunda mitad
Y muy especialmente tras el tanto del empate, pues antes
tuvo dos ocasiones de las denominadas “clarísimas”, la
primera a los 63 minutos y medio, cuando disparó Guzmán en
buena posición, pero su disparo fue malo, sin acierto, con
lo que se lució, sin más, el meta Campos.
Cuatro minutos después hubo la jugada tonta del partido y
creo que de toda la temporada, con un fallo garrafal de
Campos, el balón que se queda solo, rodando a su bola, con
la portería vacía y Javi Navarro que no llegó a rematar.
Ocasiones de esas se presentan una vez al año, si acaso y no
se pueden desaprovechar, la de este año se fue al “limbo”.
Y menos mal a que eso se pudo suplir con el gol del minuto
82, porque de lo contrario habría sido el verdadero
carnaval, con o sin máscara.
Los dos goles
Uno en cada tiempo y ninguno de ellos en verdadera jugada de
gol. Primero marcaron los cadistas, a los 33 minutos, era el
0-1 y lo consiguió, de cabeza, Enrique, a la salida de un
corner, creo que el primero que lanzó, desde la esquina, el
Cádiz.
Una vez más, y no es la primera, la defensa anduvo poco
lista, en una jugada que no era de verdadero peligro, ante
el marco de Fock.
En la segunda parte, tal y como se habían ido poniendo las
cosas, el Ceuta lo empezaba a pasar mal, hasta que en el
minuto 82 llegaba el 1-1, con disparo de Seguro, desde fuera
del área, tras varios despejes infantiles de la cobertura
visitante.
Se habían salvado los muebles, sabía a poco ese empate, pero
menos era si hubieran perdido un partido, ante un equipo
que, en teoría, en la línea de salida, parecía muy superior,
pero sobre el terreno de juego no era así, porque este Cádiz
no es nada.
Ahora a cuatro puntos
Es lo que hay, pero se tiene que recortar esa diferencia,
ahora que comienzan, especialmente, los cruces entre equipos
con la misma problemática.
Hay 30 puntos en juego, todavía, de ellos 15 en casa y otros
tantos fuera, pero hay que saber por donde hay que empezar y
luego seguir puntuando.
No es el mejor calendario el que ahora tiene el Ceuta, pero
los demás, también, tendrán que soportar lo suyo, con lo que
nadie lo va a tener muy fácil.
Preocupante empieza a ser la situación, el goal average con
el Cádiz es favorable a los gaditanos, con San Roque habrá
que ver lo que se puede hacer allí, al final de la
competición y al Melilla se le recibirá en la penúltima
jornada.
Recortar distancias es lo que hay que hacer, hay que ser
superior a los adversarios y, especialmente, ser más
resolutivos.
El fin de semana a Jaén
Es un campo del que se han sacado puntos en muchas
ocasiones. Además al Jaén no le van las cosas demasiado bien
allí, lo malo es que, como ha sucedido en otros campos,
ahora, precisamente, es cuando más falta le hacen los puntos
también al Jaén, con lo que no dará demasiadas facilidades.
Los tres puntos frente al Jaén llevarían al Ceuta a una
situación cómoda, todavía fuera de los cuatro primeros. Lo
malo sería que ahora, con la falta que aquí hacen los
puntos, fuera el Jaén el que empezara a resucitar de su
aparente sueño en la temporada.
Hay que ser sinceros, no se puede volver a perder nada por
ahí, porque un resbalón más terminaría con muchas de las
aspiraciones del Ceuta, aunque, repito, todavía quedan
muchos puntos por disputar.
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OPINIÓN
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EL ANALISIS
