Cansados de comprobar el “proceso de deterioro del sistema
educativo”, que sitúa a Ceuta “a la cabeza de la vergonzosa
clasificación de fracaso escolar” del país, la Junta de
Personal Docente ha acordado por unanimidad “iniciar una
movilización social” tendente a exigir al Ministerio de
Educación la adopción de medidas que inviertan esa
tendencia, criticada por el profesorado.
La Junta de Personal Docente, en sesión plenaria celebrada
ayer lunes, ha acordado, por unanimidad de los miembros
presentes, iniciar una movilización social tendente a exigir
al Ministerio de Educación la adopción de medidas que
permitan invertir la tendencia del proceso de deterioro que
está sufriendo nuestro sistema educativo, y que nos sitúa
“en cabeza de la vergonzosa clasificación de fracaso escolar
de nuestro país”.
Después del encuentro mantenido por los sindicatos con el
ministro Gabilondo, en su visita a la ciudad, los resultados
“no han sido los esperados”.
El desencanto del sector educativo se manifiesta ahora en el
profesorado, que intentará convencer a los padres para que
éstos secunden las movilizaciones aprobadas ayer por la
Junta de Personal.
FAMPA y Foro
La primera de las medidas adoptadas es la de promover una
reunión con la Federación de Asociaciones de Padres y Madres
de Alumnos (FAMPA) para explicar la postura del profesorado.
Igualmente se solicitará una sesión extraordinaria del Pleno
del Foro de la Educación de Ceuta con la intención de
sensibilizar a la comunidad educativa, y a la sociedad en
general, “sobre la gravedad de los problemas educativos
presentes y futuros” en la ciudad.
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Manifiesto de los docentes sobre el deterioro educativo
El sistema educativo local
presenta una serie de deficiencias estructurales que están
repercutiendo, de manera muy lesiva y directa, en la calidad
de la enseñanza, siendo una de las principales causas del
elevado fracaso escolar que afecta a nuestra Ciudad. Al
inicio del presente curso, toda la comunidad educativa se
movilizó alertada por un indisimulable proceso de deterioro,
ante el que el Ministerio de Educación se mantenía
impasible. Los sindicatos representativos, las asociaciones
de padres y madres de alumnos, así como el Foro de la
Educación, pusieron de manifiesto su profunda preocupación
por esta situación, a la vez que exigían al Ministerio un
cambio radical en su política. Esta movilización tuvo su
punto de inflexión en la visita que el Ministro de Educación
realizó a Ceuta en el mes de noviembre. Expresó públicamente
su comprensión de la realidad ceutí, y asumió el compromiso
de intervenir decididamente para superar las notables
deficiencias reconocidas. La comunidad educativa creyó al
ministro. Y aguardó con paciencia. Sin embargo, una vez
transcurrido el tiempo, y a tenor de la información
disponible, debemos concluir que aquella visita sólo tuvo un
carácter propagandístico. La política del Ministerio no ha
experimentado cambio alguno. Y las reivindicaciones
planteadas por la comunidad educativa ceutí han sido
absolutamente orilladas. No se han tomado medidas para la
habilitación de nuevas unidades, no se ha producido el
incremento de plantillas necesario, más bien todo lo
contrario, ya se ha reducido las plantillas de los
Institutos de Educación Secundaria, se anuncian nuevos
recortes, y no se registran avances significativos en otros
ámbitos. De este modo, estamos condenados a que los
problemas denunciados, lejos de entrar en una vía de
solución, se agudicen aún más, llevando a los centros a una
situación insostenible. Por ello, los sindicatos
representativos del profesorado, queremos hacer un
llamamiento a la sociedad en general, y a las instituciones
públicas en particular, para exigir al Ministerio de
Educación aulas y profesorado suficiente para satisfacer las
demandas educativas reales de nuestra Ciudad. Queremos
atender a nuestra población escolar con dignidad. Exigimos
ratios que nos permitan educar y no sólo custodiar,
especialmente en educación infantil, y plantillas que nos
permitan cumplir con la legislación vigente en materia de
Atención a la Diversidad. Sólo así podremos combatir con
éxito el fracaso escolar. Nos va el futuro en ello.
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