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Qué fácil es aparentar que se está haciendo política
utilizando el antiguo “arte” de la crítica.
Como todos los ciudadanos podemos comprobar con un simple
vistazo a los periódicos locales, la política habitual de
los partidos de la oposición de nuestra ciudad se basa en
utilizar la crítica como única “arma electoral” contra el
gobierno de Juan Vivas. Si se preocuparan más de hacer un
buen trabajo en beneficio de los ceutíes no olvidarían
refranes como, “ver la paja en el ojo ajeno y no la viga en
el propio”.
Aunque a veces nos cueste diferenciar hasta donde llegan las
competencias de la Ciudad y donde las del Estado por motivos
como, los geográficos, los convenios firmados, cesiones,
etc., sólo es necesario preocuparse leyendo un poco y
preguntando para hacerte una ligera idea de cómo funciona
todo.
¿Alguien en Ceuta se ha percatado de alguna diferencia
después de la millonaria reforma realizada por el Estado en
la carretera de Benzú? Yo desde luego, no, y teniendo en
cuenta esto, ¿no sería natural que le exigiéramos al estado,
por lo menos mediante el voto, alguna responsabilidad
después de los meses de obras que tuvimos que soportar y de
la cantidad de millones de euros que esa obra costaría?
Otro ejemplo lo tenemos en la carretera nueva que es
carretera nacional y por tanto, competencia del Estado, o
eso debería, porque a los único que he visto alguna vez
trabajando es a personal de empresas municipales.
Cómo tienen la desfachatez de no dejar de publicar que el
gobierno local sólo se preocupan por el centro y olvidan las
demás barriadas cuando, desde el inicio de la Almadraba
hasta la frontera parece, por su deplorable estado, más
típica de Castillejos que de Ceuta debido a la falta de
acerados, buenas carreteras y ausencia total de autoridades
nacionales entre otras cosas. Si realmente quieren hacer
algo productivo para los caballas, que lo dudo, que se
preocupen por exigir a su partido que inviertan dinero en
adecentar esa zona y habilitar dos carriles por sentido ya
que, en la actualidad dicha carretera, la evitara sin
ninguna duda cualquier corredor o ciclista que precie su
vida.
También podrían preocuparse que el Ministerio de Interior
cediese todos aquellos terrenos, locales, naves y cuarteles
del ejército que actualmente no utilizan y se encuentran
totalmente abandonados aunque para ello, fuera necesario
adaptarse a un uso limitado.
Y como no, el hospital fantasma, o así lo llaman sus
usuarios, que es ya para echarse a llorar. Además de la
falta de personal necesario que debería ser cuanto menos
ilegal, parece estar situado en una “zona de guerra”, puesto
que, cualquiera que vaya allí y estacione su vehículo,
terminara con los zapatos llenos de polvo, tierra, barro o
algo peor.
¿Por qué el gobierno de la nación no se preocupa de Ceuta y
encima el PSOE de Ceuta en lugar de exigir a su propio
partido que cumpla sólo ocupa sus días en criticar al
gobierno local?
Preguntas como estas, sin respuesta, son las que rondan mi
cabeza cuando diariamente leo las noticias políticas en los
medios locales.
Aunque para alguno pueda parecerlo, ni mucho menos me
considero saber más de política que los representantes de
los partidos de la oposición, lo que si se es, que la
ausencia de un programa electoral serio y la crítica
continua, no son formas de trabajar por los caballas.
Tal vez, una solución sería, que buscasen en un libro de
economía el significado de Marketing, que coloquialmente
hablando y aplicado a la política, trata de satisfacer las
necesidades que los ciudadanos demanden, no gastándose así,
el dinero público en sandeces que nadie necesita.
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